Poco a poco lo que conocemos se torna gris y adquiere un sabor amargo; no depende de nosotros y no hay nada por hacer cuando el corazón se estruja porque las preocupaciones son demasiadas o porque los miedos se desbordan, ni las palabras más bellas sobre la faz de la Tierra lograrán sanar ese hueco en el pecho. Las personas que sufrimos de ansiedad somos los únicos que sabemos con exactitud qué es lo que está sucediendo en nuestro interior y que un “relájate” no es tan fácil como los demás creen.
Lo peor de experimentar cuadros ansiosos es que se pueden presentar hasta en la más inusitada situación, haciéndonos pasar, además de todo, una vergüenza muy especial pues existen otras personas que son capaces de advertir en nosotros una actitud extraña o desesperada. Esa angustia permanente que habita en algunas almas humanas no pide permiso ni perdón ante ciertas circunstancias de aparición, que, a final de cuentas, son siempre.
Por eso, aquellos que vivan en esa preocupación constante y casi psicótica entenderán a la perfección que ningún momento escapa de estos pensamientos fatalistas o desconcertantes, incluso durante el sexo.
Entonces, las siguientes opiniones les sonarán muy familiares para saber que no están solos y que no tiene nada de extraño seguir con estos planteamientos en el futuro siempre y cuando se trabaje con ellos para una superación.
¿Traigo ropa interior bonita?
¿Le gustará lo que uso? Quizá debamos parar, no recuerdo qué me puse hoy… ¿Debería ir al baño antes y revisar? Mejor apago la luz…
No me bañé
Creo que no tomé una ducha hoy, ¿o sí? A lo mejor y sí… pero ¿y si se da cuenta de que no?
Los sonidos
¿Esos sonidos provienen de mí? Deberíamos bajar la intensidad, esto suena muy mal…
¿Y si el condón se rompe?
¿O si ya tiene un pequeño agujero? ¿O si se queda adentro? ¿O si se sale?
¿Estoy haciendo los sonidos indicados?
¿No estaré exagerando? Quizá sueno como un animal muriendo…
¿Lo estará disfrutando?
¿O fingirá? Probablemente la esté pasando horrible y no quiere decírmelo.
El sudor
Por favor, cálmate, yo interno. Estás sudando mucho, eso no es normal ni sexy… Espera… ¿Es mi sudor?
¿Qué estará pensando?
Hay una probabilidad de que esté pensando en algo distinto, igual que yo. ¿Debería preguntarle o sería extraño?
Lo que está viendo
¿Le gustará esta pose? Demonios… me veo peor así. Y la piel se ve completamente arrugada… ¿Debería comprar una crema para eso? No. Es demasiada exageración. Aunque hace unos días vi una en promoción en el súper… ¡El súper! Se me olvidó ir hoy…
Ir al baño
¿Le diré que debo orinar? Estoy muriendo… ya no aguanto más… ¿Y si me hago aquí?
Otras cosas
¿Cómo le digo que se nos va a hacer tarde para el cine? Odio llegar tarde, lo sabe. Además, ya tengo hambre.
Crisis final
a) Seguro ya está embarazada
b) Seguro ya me embaracé
c) Seguro ya contraje una infección/enfermedad
d) ¿Por qué lo hice?
Vivir con ansiedad es un problema que se puede tratar de manera efectiva, sólo necesitas ser paciente contigo mismo o con ese alguien que lo padece; tampoco es tan grave como lo mira el resto de la gente, sólo se necesita apoyo, identificar qué cosas te estresan más que otras y contárselas a quien esté dispuesto a acompañarte.
***
Te puede interesar:
Fotografías que sólo las personas con ansiedad entenderán
10 cosas que puedes decir si la persona que amas tiene ansiedad
**
Referencia
Hello Giggles