“Las miradas se cruzaron y eso fue suficiente para crear una conexión que iba más allá del lenguaje. Ella hablaba rápido y él no entendía una sola palabra, pues era su segundo día en ese país, sin embargo no eran las palabras en lo que él se fijaba, era esa mirada penetrante que escondía una propuesta más allá de lo que su boca declaraba. No pasó mucho tiempo para que las similitudes culturales surgieran efecto y como sucede en cada fiesta en cada país, las personas charlaban, cambiaban de pláticas, se alejaban y regresaban. Pronto ellos quedaron a una distancia corta y peligrosa, intentando asumir las apariencias sonreían y miraban a los demás, pero pronto fue imposible que una mano no tocara una espalda desnuda, que unos labios se humedecieran sensualmente y prácticamente que el lenguaje corporal dijera todo eso que las palabras no podían comunicar. En un momento de intensa tensión —esa en la que los ojos son capaces de ver algo, pero la vista periférica no se aleja del objeto de deseo, cuando es imposible pensar en algo más— ambos desaparecieron, subieron las escaleras y esta vez él dijo algo que ella no comprendió, pero sabía que lo que ella hiciera a continuación sería la confirmación de un acuerdo que demuestra que no hay que hablar el mismo idioma para entenderse. En un limpio y sensual movimiento dejó caer el vestido y ambos se dedicaron a conocerse sin palabras”.
El amor es un lenguaje universal, por lo que el erotismo que surge de éste puede comprenderse en cualquier país. El cine es experto en hacer del placer carnal algo sumamente artístico e impactante, subiendo el nivel dependiendo la forma en que se busque sorprender al espectador. Afortunadamente el cine es un lenguaje universal, pero cada país tiene una visión distinta bajo la que ha mostrado cómo vive su erotismo. Conocer, experimentar, imitar o seducir; cualquiera que sea tu intención, las siguientes películas eróticas extranjeras son perfectas para perderse en la intimidad con alguien más.
“Carne Tremula” (1997) – Pedro Almodóvar
Almodóvar ha marcado una estética en sus películas, por lo que es muy fácil identificarlas. En “Carne Trémula” es bastante notorio. Una historia acerca de un accidente casi fatídico se desarrolla junto a sensuales escenas eróticas, pero lo que verdaderamente hace que la piel se erice al ver esta cinta son los diálogos expresados por Javier Bardem, Penélope Cruz, Francesca Neri y Ángela Molina. Un verdadero orgasmo causado por las palabras.
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“Betty Blue” (1986) – Jean Jacques Beineix
El amor, además de ser el camino a la felicidad, también puede significar el camino a la perdición y la locura. No existe forma más romántica de explicar eso que con esta erótica y desgarradora cinta francesa acerca de una pareja que entre arrebatos de amor y pasión, sufren la violencia que cada uno es capaz de producir. La cinta comienza en medio de la acción, no la de la trama, sino la de un acto sexual increíblemente sugestivo que te deja saber desde ese momento que ésta es una cinta que no olvidarás pronto.
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“La Bête (La Bestia)” (1975) – Walerian Borowczyk
Descrita como una película erótica/pornográfica de horror y fantasía; “La Bête” es una cinta de culto del cine francés que cualquier amante de la comedia y el sexo amará. Entre la realidad y la fantasía, una bestia persigue a una mujer, por lo que las escenas sexuales pueden ser un tanto extrañas, pero al ver la cinta en su totalidad encontrarás que el erotismo es muy bien logrado y te olvidarás de las situaciones poco convencionales mostradas en la cinta.
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“Turks Fruit” (1973) – Paul Verhoeven
El amor entre una mujer de mente abierta y un artista se ve comprometido por distintos problemas a lo largo del tiempo. Primero es la madre de ella, luego son las actitudes extrañas de ambos y muchas otras cosas que demuestran que las relaciones pasionales siempre tienen un trasfondo complicado. Una bella historia de amor que evoluciona entre eróticas escenas que, al verlas en pareja, pueden llegar a ser pausadas debido a que lo que aparece en pantalla se convierte en una escena a imitar en la vida real.
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“Maîtresse” (1976) – Barbet Schroeder
Una de las grandes miradas al mundo del BDSM en los años setenta. Con la actuación de Gerard Depardieu, esta cinta alcanzó un nivel de polémica tal, que fue vetada en Estados Unidos y Reino Unido. Con una trama salida de la pornografía más tradicional (una mujer llama a unos plomeros para que la ayuden en su casa, uno de ellos planea robar la casa y encuentra un cuarto lleno de artefactos BDSM, después se entrega a las órdenes de la mujer que es una dominatrix) la cinta parece una película de explotación, pero la artística mirada del director hacen de ésta una de las obras más entrañables del erotismo francés.
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“Jag är nyfiken (Soy curiosa)” (1967) – Vilgot Sjöman
Un experimento cinematográfico digno de entender como erotismo documental. Entre ambos géneros se mueve esta cinta dividida en dos “Amarillo” y “Azul”. Ambas películas abordan a Lena, una joven sueca que desea conocer más acerca de la revolución sexual que se está viviendo en su país. Además de tener fuertes escenas eróticas, también es un crudo retrato de lo que muchos vivieron en una época en la que el amor dejó de ser esencial para las relaciones sexuales.
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“Monamour” (2006) – Tino Brass
Una pareja recién casada vive una aburrida vida sexual gracias al egoísmo del hombre que no se preocupa por el placer de su mujer. Se aman, pero eso está destruyendo el matrimonio y todo cambia cuando la mujer conoce a un artista italiano que la posee de una forma que ella aparentemente ama. Entre celos y desamor, la pareja ahora debe conectarse a partir de las nuevas experiencias que ella tuvo con alguien más.
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“The Wayward Cloud” (2005) – Tsai Ming-Lian
A veces el cine asiático es infravalorado por la narrativa, pues es bastante distinta a la occidental, pero después de unos minutos es posible acostumbrarse a la historia de “The Wayward Cloud”. Una película que hace uso de la comedia para mostrar escenas transgresoras en las que un elemento clave del sexo es la fruta. Extraña, pero muy entretenida, es una cinta perfecta para entender el erotismo desde otro punto de vista.
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El cine erótico siempre está en producción y todo el mundo tiene algo interesante que presentar. Si buscas algo más apegado a ti, estas cintas eróticas en español podrían ser de tu interés o bien puedes probar con algunas cintas exclusivas del cine francés que puedes ver con tu pareja.
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