Cada noche, cuando te recuestas, estás dispuesto a leer tu libro favorito y empezar a imaginar mundos que ya no parecen tan imposibles. Seguramente has visto en tu librero algún ejemplar misterioso que te da miedo abrir, sabes que estarás atemorizado desde que ves la portada, pero pronto te armas de valor y lo tomas.
Una página y sientes el escalofrío que recorre tu cuerpo, pero te haces el valiente y consideras que puedes continuar. Pasas la siguiente hoja y el miedo espesa tu saliva… quieres ir a la cocina por un poco de café o agua fría para distraerte y dejar de pensar lo que habrá debajo de tu cama, pero no te atreves. El miedo se ha apoderado de ti.
No necesitas imágenes porque tu imaginación es más fuerte, más poderosa. Tu corazón tambalea y crees que morir de miedo no es tan imposible como lo considerabas antes de cambiar la página. Deslizas tu dedo para darle vuelta a la hoja y ya no puedes más, te encuentras aterrorizado. Metes tu cuerpo debajo de las sábanas para que, al menos, sea más difícil que la criatura te encuentre. Ya no puedes continuar, ya no quieres y llegas a pensar que la posesión del libro se traslapó a ti con sólo tocar las malditas páginas.
Lees como si el demonio estuviera dentro de ti, no puedes detenerte pero necesitas parar. Cierras el volumen por fin, pero ahora la lucha es interna, psicológica, tu mente está lista para acabar contigo y tú sólo puedes pensar en el error que cometiste al agarrar ese libro que se veía tan prometedor. Cierras los ojos y un cúmulo de imágenes aparecen en tu mente como si fueras el protagonista de la historia. Sostienes, como si no quisieras, el santo que yace en la cabecera de tu cama y mientras rezas en voz baja, logras conciliar el sueño.
¿De qué libro hablamos? Al menos de alguno de estos ocho.
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“The Woman in Black”, Susan Hill
Una novela de horror que muchos conocemos por sus diversas adaptaciones al teatro y cine. También existe una serie de televisión que se produjo en 1989. Cuenta la historia de un joven abogado, Arthur Kipps, quien asiste al funeral de una anciana y comienza a ver el espectro oscuro que podrá predecir la muerte de pequeños niños. Este libro de casas embrujadas y apariciones fue uno de los primeros en cimbrar los corazones de todos los lectores. Con una narración en primera persona, da un toque familiar y mucho más empático a todas las apariciones que relatan.
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“It”, Stephen King
El miedo no es un payaso, sino que se encuentra en cada uno de nosotros y nos invade hasta dejar de respirar. Sin embargo, un monstruo llamado “It” prefiere tomar esta apariencia para acercarse a aterrorizar a sus presas favoritas: niños y adolescentes que fácilmente pierden los estribos ante el terror que les provoca. La historia la protagonizan siete niños que intentarán terminar con el terror que acecha su hogar desde hace siglos.
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“The Shining”, Stephen King
Si la película dirigida por Kubrick te hizo sentir un terror absoluto, el libro de Stephen King lo hará mucho más. La tercera entrega del escritor estadounidense está basada en un cuento de Edgar Allan Poe conocido como “La máscara de la muerte roja”. Cuando al escritor Jack Torrance le ofrecen cuidar el hotel Overlook durante el invierno, sin dudas acepta para demostrarse que está completamente curado de su alcoholismo. El pueblo más cercano está a 65 kilómetros y el invierno hace que todas las rutas estén cerradas. Sin embargo, su estancia en el hotel no será lo que alguna vez pensaron, poco a poco la familia descubre terribles espíritus y escalofriantes escenas que terminan por cimbrar en ellos el poder de descuartizar.
-“Rosemary’s Baby”, Ira Levin
Los Woodhouse son un matrimonio que acaba de mudarse a un edificio frente a Central Park aunque un amigo les ha advertido que está maldito. Todo parece tranquilo y normal, sus vecinos son buenas personas y la ubicación se convierte en un factor clave para tener una vida más estable. Así, el matrimonio decide tener un hijo. La esposa, Rosemary, tiene pensamientos en los que una extraña criatura tiene sexo con ella y así, poco a poco comienza a sospechar que sus “alucinaciones” quizá son más reales de lo que cree. La película basada en esta obra maestra del terror da miedo, pero conocer la historia sin ningún tipo de restricción cinematográfica probablemente te traumatice más de lo que crees.
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“The Ring”, Koji Suzuki
Si creías que lo más impactante de “The Ring” era ver cómo una mujer salía poco a poco del televisor hasta incorporarse frente a ti y proclamar tu muerte, en realidad, el suspenso y terror de este libro va más allá. El miedo absoluto comienza a correr por un grupo de estudiantes cuando ven una misteriosa cinta, reciben una llamada y mueren en una semana. Un periodista comienza a investigar los extraños sucesos y ve el video que lo vuelve presa de un terror que nunca imaginó posible. Una historia redonda de verdadero terror japonés que nos demuestra que las imágenes impactantes no lo son todo.
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“The Amityville Horror”, Jay Anson
El procedimiento fue éste: durante la cena puso somníferos en la comida para que todos durmieran profundamente. Con su rifle calibre .35 los asesinó poco a poco y más tarde declaró que lo hizo porque una voz en su interior se lo ordenó. Ésta es la historia que Jay Anson relata acerca de los hechos que ocurrieron en el pueblo de Amityville. Según cuenta la escritora, la casa fue poseída por presencias que los acecharon hasta el final. El asesino fue Ronald DeFeo, quien más tarde cumplió una condena de seis cadenas perpetuas. A diferencia de la cinta, que con actuaciones poco espectaculares dejaron mucho qué desear, en el libro realmente logras imaginar el siniestro crimen que la familia vivió.
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“Soy leyenda”, Richard Matheson
Una historia que nos cuenta qué pasaría si hubiera una pandemia provocada por una guerra bacteriológica. A diferencia de la película, en la historia de Matheson —uno de los grandes maestros del terror—, las personas de la Tierra se han convertido en vampiros: unos resucitados y otros infectados por el virus. Neville, el protagonista, tiene una vida monótona: es el único sobreviviente de la ciudad, estudia tanto que pronto intenta investigar los hechos que ocurren mientras su mundo se desvanece entre la cordura y su imaginación. –
“Drácula”, Bram Stoker
Una de las obras claves de vampiros que sentó las bases para su figura como la conocemos actualmente. Bram Stoker logró darle más fuerza a la figura del vampiro a través del misticismo y la maldad del Conde en su obra. Es responsable de muchas de las cualidades que ahora posee un vampiro, como no reflejarse en el espejo; otras las retomó de sus antecesores y así, logró dar vida al vampiro más popular y aterrador de todos los tiempos. Sin embargo, las películas nunca han logrado hacerle justicia y los verdaderos amantes del género vampiresco no pueden resistirse a leer sus más de 500 páginas.
¿Un buen libro de terror cumple con los requisitos que poseen estas novelas? Existen más, muchas más que con maestría desarrollan su trama, aquí algunos de ellos que no te permitirán ni cerrar los ojos.
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