Para hacer arte que conecte con el público, el artista debería sentir primero aquello que quiere proyectar.
Ese es uno de los conceptos más populares en torno al arte, siendo la actuación en donde resulta más evidente con la utilización del método. No obstante, existen teóricos que consideran que aquellos que necesitan experimentar aquello que quieren provocar en su audiencia carecen de habilidad y por lo tanto, no son maestros de su arte.
Algo parecido podría argumentarse sobre el arte pictórico, aunque no sea una experiencia tan directa como la actuación. Sin embargo, ¿cómo pintar de algo que no se conoce?
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Andy Warhol fotografiado por William John Kennedy
En ese sentido, Andy Warhol fue un artista que a lo largo de su vida demostró interés por comprender a la perfección las emociones humanas, en particular la del amor… y siendo sinceros, ¿quién no estaría dispuesto a comprenderlo, en especial si eso significara acortar las penas y alargar el enamoramiento y las ilusiones?
A partir de su autobiografía, The Philosophy of Andy Warhol (From A to B and Back Again) —Mi filosofía de A a B y de B a A—, de 1975, Alexxa Gotthardt extrajo una pizca del sentir de este popular artista con respecto al amor, el sexo y las relaciones de pareja, que hoy pueden extrapolarse como un gran consejo de alguien que supo amar la belleza como nadie más:
«Sólo cierra los ojos. No mires.»
En otras palabras, Warhol planteó que para enamorarse bastaba no pensar en demasía sobre enamorarse. En particular porque pensar demasiado puede ser la tragedia de muchos… y muchas relaciones de pareja. Según sus palabras: «El mejor amor es el amor que no se piensa».
El precio del amor
Warhol parecía tener una opinión dividida sobre el espacio personal y la pérdida de la soledad cuando se tiene una pareja. Si bien no estar solo era mucho mejor que ser alguien solitario, la realidad es que no sólo se pierde tiempo, sino espacio en una habitación o hasta en la propia cama. Así que la distancia puede ser un complemento ideal para cualquier gran pareja.
«Yo vivo más al norte y ella en el centro. Es un arreglo maravilloso: no tenemos que oler nuestro mal aliento por las mañanas y aún así tenemos maravillosos desayunos todas las mañanas como cualquier otra pareja feliz».
Andy Warhol, Love 311, 1983.
«El amor de fantasía puede ser mejor que el amor real.»
Este puede ser un consejo controvertido y explica mucho de las propias contradicciones de Warhol, aunque la fantasía puede ser ideal para mantener viva una relación pues provoca anticipación y emoción. En lo imaginario nadie puede lastimarte ni te decepciona. Ahora bien, cuando se trata del sexo, Warhol profundiza en cómo no tenerlo con la persona de la que te enamoraste lo hace mucho, mucho más emocionante.
«La cosa más emocionante es no hacerlo. Si te enamoras de alguien y nunca lo haces [tener sexo], es mucho más emocionante».
Ambos deben invertir el mismo tiempo, energía y esfuerzo
Y probablemente sea uno de los mejores consejos cuando se trata de cualquier tipo de relación. Cada uno de nosotros debería ser responsable de sus amoríos y en ese sentido, debemos cuidar invertir el mismo tiempo que la otra persona invierte, es decir, dar y recibir en la misma medida o, como Warhol dijo «Yo te pagaré si tu me pagas».
Andy Warhol, Love 312, 1983.
El amor no es perfecto
Warhol estaba convencido que nos lo deberían enseñar desde la primaria, dado que las películas y series nos han mostrado una concepción de que el amor es permanentemente perfecto, cuando en realidad tiene altas y bajas.
«La gente tiene tantos problemas con el amor, siempre buscando que alguien sea su Via Veneto, su suflé que no se desinfla», y eso no es real.
Sin duda este último consejo es fundamental para entender cómo comprendemos y qué esperamos del amor. Creemos que está sujeto a las reglas que las historias ficticias nos cuentan, cuando en realidad es uno de los sentimientos humanos más complejos, difíciles pero bellos que podemos experimentar. A pesar de las contradicciones en su texto, Warhol nos hace saber que en realidad sabía por lo menos algunas cosas sobre el amor.
Andy Warhol, Love 310, 1983.
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