Cuando las voces suaves mueren,
su música vibra aún en la memoria
—Percy Bysshe Shelley
El tiempo corre por la vida como un guepardo hambriento y nosotros, que somos la presa, intentamos gozar el trayecto. Por ello la suma de recuerdos emotivos que nos componen es una suerte de gemas delicadas y luminosas que queremos conservar. Las fotografías capturan lo vivido, registran una época y al detenernos a mirarlas saboreamos una deliciosa nostalgia. En un amplio sentido, la fotografía de Nora Lezano apunta hacia esos objetivos.
Nora Lezano
Nora Lezano ha inmortalizado hermosos momentos, razón por la que se ha convertido en una de las fotógrafas argentinas más destacadas de todos los tiempos. Asimismo se ha destacado por realizar numerosos retratos de músicos, escritores, modelos y artistas, entre los que se encuentran Charly García, Gustavo Cerati, Mario Vargas Llosa, Luis Alberto Spinetta, Fito Páez e incluso Kurt Cobain, a quien capturó cuando Nirvana tocó en Buenos Aires, en 1992.
Charly García y Luis Alberto Spinetta
A nadie debe resultar extraño que la trama de su vida parezca sacada de un cuento. En este caso, de un cuento rockero. Era 1990 cuando la fotografía tocó la puerta de Lezano. Llegó repentinamente, personificada en su amiga, quien la invitó a inscribirse en un curso. A pesar de que dicha amiga nunca acudió a las clases, fue sin lugar a dudas un puente. Mientras esto ocurría, Lezano, como la auténtica fan que era y es, acudía a todos los recitales que podía, acompañada de su cámara y un fiel cuaderno de notas.
Lo que ella nunca imaginó es que su pasión por la música sería la corriente que la llevaría a conocer a esas estrellas que parecían tan inalcanzables desde los pósters y los escenarios.
Lezano con Charly García
Gracias a su talento, a su naturaleza hipnótica y a esa facilidad para transmitir confianza, la fotógrafa cautivó a sus ídolos y reveló la esencia de cada uno mediante imágenes. Como ella misma afirma: “Busco despojarlos de su pose de rockstars”. También se encargó de realizar las fotos de tapa de numerosos discos de rock y otros géneros musicales. Sólo le bastó jugar, desnudarse, hacer gestos. Lezano conseguía seducir a esas “míticas” figuras durante cada sesión y ellos contentos se dejaron descifrar, guiar. En otras palabras, fluían juntos. Y ella permanecía atenta, siempre observando sin dejar de apreciar la parte humana y olfateando instintivamente el segundo que se volvería eterno.
Gustavo Cerati
“Es la primera vez que me reconozco en una foto”, fueron las palabras de Gustavo Cerati al ver que su alma había sido plasmada por alguien. Lo decía mientras besaba las manos de aquella mujer, que sería la encargada de las fotos más icónicas del añorado vocalista de Soda Stereo. Esta anécdota sería una de las que marcó profundamente a la también artista visual.
Dato curioso: luego de fotografiar a alguien, Lezano siempre le pedía que le dibujase un perrito, lo que le ha legado variada y peculiar colección que atesora.
Fito Páez
El arte de Lezano no es exclusivamente fotográfico. También publicó un libro titulado Sin sueño se duerme también, el cual es una recopilación de las memorias, de ese pequeño cuaderno de notas que la ha acompañado durante toda su vida. Ella, con ese ángel natural que tiene, se convirtió en amiga de muchos de los músicos que siguen cautivando a generaciones.
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Todo surge a partir de algo más. Nada es completamente espontáneo. Sobre todo en el arte y en la música, todo es producto de algo que le antecedió. Ya conoces las bases. Ahora es tiempo de conocer a las 13 bandas del nuevo rock argentino que están cambiando la forma de hacer música en su país.