La artista iraní Shirin Abedinirad completó recientemente su último trabajo: Mirrored Zigurat (Zigurat de espejos), una pirámide de espejos instalada cerca de la costa de Sidney, Australia, como parte de del festival Underbelly Arts Festival. El propósito de esta obra, como de sus obras anteriores de espejos, es conectar el cielo a la tierra (o viceversa, dependiendo de la perspectiva) para crear una inusual ilusión óptica desde el ángulo en que se vea.
Para esta instalación, Abedinirad se inspiró en la estructura piramidal de los Ziggurats, templos piramidales de la antigua Mesopotamia que conectaban el cielo y la tierra, cuyo propósito era convertirse en una escalera que acercara la naturaleza a los humanos y a la vez buscaba una unión con Dios.
La obra Mirrored Ziggurat busca esta trinidad, así como conectar al mudo actual con el mundo antiguo. Ofrece al espectador una tranformación de sí mismo y de su papel con respecto a la Tierra y a lo etéreo. Los siete pisos de la pirámide hacen alusión a los siete cielos, los espejos crean una ilusión óptica que hacen que el paraíso se amplifique, trayendo la luz, un concepto de suma importancia para la cultura persa.
A demás, la artista ha ganado participación en la moda, arquitectura, e instalaciones de arte, siempre defendiendo a través de sus obras los derechos humanos, la identidad y la historia.