Algunos de los recintos afectados fueron el Giardini y el Arsenale, el conjunto de parques y edificios que albergan la Bienal de Venecia, a pesar de que en el momento de la inundación no había obras de arte expuestas, la comunidad artística está considerando los potenciales riesgos que representa considerar a Venecia como un sitio de almacenamiento o exhibición para cualquier tipo de artefacto valioso.
Por ejemplo, el Palacio Zaguiri, no corrió con la misma suerte ya que dos cuadros valuados en un millón de euros del pintor español, Joan Miró, se impregnaron de agua durante la inundación en el 2018. Las obras se encontraban en un segundo piso del palacio, donde se encuentra la exposición De Kandinsky a Botero. Las pinturas de Miró fueron enviadas con urgencia a un taller de restauración.
Foto: The Vergue
También se debe considerar la cantidad de frescos y murales pintados a lo largo de la pintoresca ciudad, al estar pintados directamente en antiguos muros que son mucho más susceptibles a la erosión y humedad. Algunos expertos aseguran que aún hay oportunidad para salvar la mayoría de ellos.
Otro de los gremios severamente afectado es el de la literatura, específicamente bibliotecas y librerías, como es el caso de Acqua Alta o Goldoni, establecimientos que perdieron cientos de libros. Con respecto a las bibliotecas, la Fundación Querini Stampalia, que alberga numerosas obras artísticas y una valiosa biblioteca registró pérdidas de miles de euros; 35 metros de libros del final del siglo XIX deberán ser urgentemente tratados para analizar su posible restauración y 600 metros de publicaciones de la biblioteca moderna han quedado completamente sumergidos.
Foto: Telegraph UKMientras tanto la sociedad civil se ha organizado en voluntariados para salvar libros y sacar agua, por parte de la Sociedad Italiana de Autores y Editores, ha destinado 150 mil euros para ayudar a las librerías y bibliotecas que han sufrido daños.
En 1966, se establecieron organizaciones privadas de varios países diferentes para recolectar medios para restaurar y preservar Venecia. Desde entonces, más de 700 proyectos con valor de más de 38 millones de euros se han invertido en el mantenimiento de la ciudad. Venice in Peril, un fondo de caridad británico, declaró a través de su página web, con respecto este tema «A menos que exista la voluntad política de invertir dinero a largo plazo e investigar sobre esto, Venecia sufrirá gradualmente daños estructurales cada vez más costosos por el agua. Bien podría volverse en gran medida inhabitable en el próximo siglo».
Foto: ArtNet NewsLa existencia de organizaciones como estas apunta no solo al deseo mundial de mantener a Venecia en un lugar que sea hospitalario para exhibir arte, sino también cuán grave es la situación. El avance del cambio climático ha hecho que sea más obvio que nunca que Venecia, y otras ciudades como esta, pueden no ser eternas para este mundo. A pesar de que al momento no ha habido una situación extrema o pérdidas significativas, las instancias responsables deberían estar trabajando en un plan de contingencia.
En portada: Washington Post