“La vida de todo hombre es un camino hacia sí mismo”.
Hermann Hesse
En los giros ternarios de un vals delirante, a pisotones del aquelarre, el mexicano actual debe mantener una vista sin párpados para seguir los movimientos de sus pies y saber con quién y cómo bailar, ya sea con el chico o la chica más guapa o popular, y hacerse distinguir con pasos engalanados ante los demás presentes, ya sea con la menos agraciada y volverse el mártir o héroe de la fiesta o, sin darle importancia a la opinión de los demás, con la persona que logra, por medio del amor, desenmascarar el rostro olvidado y así liberar su verdadero ser.
La novela “La doble vida de Jesús” de Enrique Serna es una constante oscilación entre la esfera de lo privado y lo social, entre la vida política y amorosa, entre la apariencia y la verdad; el protagonista es un hombre de rara apariencia, un funcionario público soñador, honorable y justo que no cabe en esta sociedad corrupta y consumida por el hampa.
Jesús Pastrana, síndico idealista y marido vilipendiado, se encuentra ante la oportunidad de su vida: obtener la precandidatura del PAD al puesto de alcalde en la ciudad de Cuernavaca. Pero ante la impunidad y el enfrentamiento entre los cárteles de los Tecuanes y Los Culebros, la ciudad de la eterna primavera se halla inundada de sangre e injusticia; los primeros con derecho de piso por antigüedad y los segundos, la nueva y mejorada generación de criminales, con la policía municipal y estatal del Estado de Morelos echada al bolsillo, son los que toman las riendas de la ciudad en la que aparentemente no pasa nada.
Un hombre llamado Azpiri, candidato al mismo puesto dentro del PAD, es el preferido entre los “padistas” de renombre. Amenazado por esto, Jesús no desiste y continúa con la candidatura. Su fortuna se ve socorrida cuando a su oficina le llega un misterioso maletín Louis Vuitton con una carta, en cuyo interior se encuentran las pruebas necesarias para denunciar a su contrincante. Después de sacarle a Azpiri sus trapitos sucios al sol, con la ayuda de su amigo Felipe Meneses, comentarista político del diario El Imparcial, Jesús logra obtener la precandidatura. No obstante, a caballo y con espuelas, una obstinada pregunta le punzaba constantemente el pensamiento: ¿Quién lo había ayudado?
Después de haber tenido una reunión con sus compañeros de la preparatoria, la cual no fue del todo agradable, con los nervios a flor de piel, Jesús decide ir a un piano-bar y tomarse unos tragos para relajarse. Entonces, de sus profundidades surge una voz que había permanecido dormida durante mucho tiempo, era el Jesús que siempre había estado reprimido por la pesada máscara de la apariencia.
Frustrado por un matrimonio disfuncional y con sus apetitos carnales al máximo, el Jesús recién exhumado convence al Jesús reprimido de ir a buscar a una prostituta y pasar un buen rato; es cuando se dirige a una zona de prostitución en donde conoce a la flamante, linda y caprichosa Leslie, un travesti de minifalda, cocainómano, con implante de busto y voluble personalidad, quien le tiene una fe inmensa a la Santa Muerte: “Yo de niña era católica, pero la Iglesia no acepta a gente como yo. En cambio, la flaquita sí me comprende”.
Jesús, por primera vez en su vida, alcanza un paroxismo nocturno tal que le hizo reflexionar sobre sí mismo y sus inclinaciones sexuales. Remedios, la esposa, empieza a sospechar y, especulando que la engaña con otra mujer, decide correrlo de la casa y pedirle el divorcio.
Como la guerra entre los cárteles se había trasladado al terreno electoral, Jesús decide realizar una campaña reformista en la que el poder vuelva al pueblo y no siga secuestrado por “una dictadura de matones”. El PAD, no contento ante esto, y al ver la posibilidad de que las autodefensas recientemente formadas perdieran el control, decide deslindarse de su candidato y favorecer —bajo el agua— al candidato del PIR, Iglesias; un hombre guapo de copete reluciente y con una esposa que era actriz de telenovelas. Con todo este movimiento, Remedios, temerosa ante la seguridad de sus hijos, se los lleva a Canadá sin dar aviso alguno.
En la novela, las divisiones establecidas entre la vida privada y social comienzan a oscilar entre sí cada vez más rápido hasta pisarse los talones y confundirse en una sola masa; sin embargo, el aparentar ya no es necesario, Jesús se había enamorado y gracias a Leslie, empieza a abrazar la luz de su nueva vida y a dejar atrás las sombras en las que solía refugiarse.
“El pájaro rompe el cascarón. El huevo es el mundo. El que quiera nacer tiene que romper un mundo”.
Herman Hesse
Con un ácido enfoque de los conflictos sociales y un humor tan cruel como la realidad que describe Enrique Serna en La doble vida de Jesús lo convierten en un thriller político de vertiginosa tensión y, al mismo tiempo, una novela de amor loco en la cual la moral de las apariencias se derrumba frente al huracán del deseo.
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Los libros nos enseñan a comprender nuestro entorno y la conducta del ser humano, así como a entender los sentimientos desenfrenados que alguna vez hemos sentido, por eso te recomendamos el libro que te enseña que el desamor sólo puede combatirse con rutina… lee más aquí.