Es muy fácil crear una maldición falsa. Sólo necesitas encontrar un común denominador para decir que una película o una serie le provocó algo a todos los que participaron.
Por ejemplo, podemos decir que, como ninguno de los hombres que interpretaron a Doctor Who lograron ser reconocidos por otro papel, todos tienen la maldición de quedarse encerrados en ese personaje. De los primeros 11 actores que tomaron el papel, sólo los últimos tres han logrado ser reconocidos por otros trabajos, mientras que el resto serán siempre recordados como El Doctor y nada más.
Obviamente no existe una maldición, pero si le añadimos un factor dramático, de pronto se vuelve sensacionalista. Así es como algunos de los siguientes papeles se ganaron una mala fama, alejando a muchos actores de querer interpretarlos, pero atrayendo a otros valientes que saben que no existe tal cosa como una maldición.
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Atuk
El filme de Atuk no iba a ser de terror ni un drama, sino la adaptación del libro The Incomparable Atuk, una comedia satírica que presenta a un cazador Inuit que viaja hacia Toronto. Sin embargo, nunca ha podido realizarse, a pesar de los distintos intentos, ¿la razón?: una posible maldición que acaba con la vida de quienes tomaran el rol del actor principal. Primero, la leyenda John Belushi recibió el guión pero murió a los pocos días por una sobredosis de drogas. Luego Sam Kinison decidió tomar el papel, pidiendo algunos cambios en el guión, lo cual lo llevó a ser despedido, y falleció en un accidente de auto poco después.
Posteriormente, John Candy iba tomar las riendas, pero murió de un paro cardiaco. Chris Farley, otra leyenda, fue considerado para el rol, pero murió de una sobredosis antes de poder encarnar a Atuk. Al final Phil Hartman iba a llevar el sueño a la pantalla, pero su esposa le disparó y acabó con su vida. Desde entonces no ha habido planes de crear la cinta, y definitivamente nadie quiere ser la siguiente víctima.
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The Joker
Aunque algunos actores han mostrado interés en hacerlo, parece que muchos le temen al papel, no porque esté maldito ni por la muerte de Heath Ledger, sino porque parece que nadie podrá superarlo y cualquier intento para hacerlo resultará mediocre. El ejemplo está en el reciente esfuerzo de Jared Leto, quien tomó el reto sin temor, pero terminó entregando una de las peores versiones, además de que era parte de un filme de mala calidad que no logra aprovecharlo ni usarlo para generar auténtico miedo. ¿Para qué tomar un rol que no va a satisfacer a nadie después de la genialidad de Ledger?
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Superman
George Reeves falleció de un disparo de bala cuando tenía apenas 45 y Christopher Reeve, el que ganó fama mundial, quedó paralizado después de una caída de caballo. Sin embargo, existe una larga lista de posibles víctimas de esa supuesta maldición, incluyendo actores de voz, aquellos que interpretaron al héroe de bebé y hasta otros miembros del cast. Además de eso, parece que el héroe nunca ha logrado crear un buen trabajo cinematográfico, y eso lo comprueba la mala recepción de la crítica frente a las películas de Henry Cavill. El mundo tiene demasiada expectativa para el héroe y no muchos están dispuestos a cargar con eso.
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El Cuervo
Brandon Lee perdió la vida filmando la película; recibió un disparo de bala no intencional, y aunque desde ese entonces se han realizado cintas de bajo presupuesto que funcionan como secuelas, nadie del mainstream se ha atrevido a hacer un remake o tomar el papel de Lee, ya que sería una falta de respeto a la creación original que probablemente nunca será superada. Asimismo, se cree que la muerte del actor hacía más interesante el personaje en la pantalla, así que no volverá a ser replicado.
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Jesucristo
Aunque podría ser sólo mala suerte, H.B Warner, el actor que interpretó a Jesús en un filme de 1927, dijo que el papel le arruinó la carrera. Jeffrey Hunter murió en un accidente fatal, y Jim Caviezel, quien lo encarnó en The Passion of Christ fue electrocutado con dos rayos y resultó herido durante la filmación. Algunos creen que es peligroso tratar de fingir ser Cristo, pero a muchos intérpretes les parece un honor.
A muchos actores les interesa un gran reto, como Jared Leto cuando tomó el control del Joker para Suicide Squad, pero otros prefieren evitarlos para no arruinar algo previamente hecho o para no estar bajo el escrutinio de los fanáticos. Sin embargo, algunos afirman que existen maldiciones que podrían atentar con sus vidas, y aunque eso no sea posible o cierto, indudablemente es una idea que muchos podemos creer por el misterio que nos gusta añadir a las historias detrás de cámaras.