¿Las estrellas de rock hacen estupideces porque tienen fama o son famosos porque hacen estupideces? Desde aventar un auto a una piscina, hasta masturbarse con un tiburón, los rockstars han realizado increíbles –y absurdas– hazañas que seguimos recordando para reírnos o asombrarnos. Entre la lista de las bandas más desastrosas se encuentra Metallica, The Who y Led Zeppelin, quienes en repetidas ocasiones fueron eximidos de sus actos inconscientes porque en sus modales y vestimentas se encontraba la construcción precisa del arquetipo del músico. Pero que hay de los Beatles, una de las bandas más importantes de la historia; ¿ellos también cometieron locuras o siempre estuvieron en el bando de “los bien portados”, separados de la rebeldía por un corte de bacinica que se agitaba al ritmo de “Love Me Do”?
Pues sí, el cuarteto del Liverpool, en grupo o por separado, también cometió acciones que bien podrían calificarse como tonterías. Aprovechando la visita a México, en esta ocasión recordaremos la anécdota en la que Paul McCartney estuvo preso durante 10 días, esto con el fin de demostrar que la estupidez es un mal natural. (No, si eres uno de esos fan from hell de Sir Paul, no te enojes. Toma esta historia como un recordatorio de que todos cometemos errores).
El relato inicia en los primeros meses de los años 80, muchos años después de la separación de los Beatles y unos cuantos meses antes de la muerte de John. En esta época Sir Paul McCartney estaba disfrutando de un segundo aire de fama desbordada gracias a la gira mundial que hacía con su grupo The Wings (proyecto que se dedicaba principalmente a tocar temas clásicos de los Fab Four). Su siguiente parada era en Japón, la exótica ciudad nipona que es perfecta para vacacionar en familia mientras uno se fuma un cigarro de mariguana. Esto fue lo que pensó Paul al cargar con su esposa Linda, sus hijos y 220 gramos de weed.
Qué hermosas vacaciones familiares hubieran sido de no ser porque la policía nipona encontró la hierba y detuvo de forma instantánea a Paul. ¿Cómo? ¿Uno de los Beatles era detenido? Sí y de la forma más absurda porque a quién se le ocurre viajar en avión y transportar droga, ni si quiera en la década de los 80 era buena idea, y menos porque el beatle la escondió en el neceser de uno de sus hijos. La prensa en ese momento decía que McCartney se sentía intocable debido a su fama y de ahí su locura y osadía.
Paul McCartney fue encarcelado por los agentes de control de narcóticos mientras su familia e integrantes del grupo se fueron al hotel a esperar la resolución del problema. Los promotores del evento declararon a los periódicos: «Casi 100 mil entradas han sido vendidas y representan una posible pérdida de más de 100 millones de yenes de las 11 fechas programadas del 21 de enero al 2 de febrero». La noticia impactó tanto que algunos fans comenzaron a exponer sus teorías sobre lo sucedido y llegaron a decir que el arresto de Paul pudo haber sido provocado por un mensaje enviado por Yoko Ono.
Por su parte, Linda dio su punto de vista de la situación a la prensa: «Es realmente muy tonto. La gente ciertamente es diferente aquí. Se lo toman muy en serio. Paul está ahora en algún lugar detenido y no se me ha permitido verlo. Tan pronto como ven a alguien bueno, como Paul, deciden hacer un día de campo de él. Nunca regresaré a Japón. Es mi primer y último viaje aquí».
McCartney pasó 10 días en prisión y posteriormente fue deportado a Gran Bretaña acusado de posesión y consumo de mariguana. Es entonces cuando regresamos a la pregunta, ¿las estrellas de rock hacen estupideces porque tienen fama o son famosos porque hacen estupideces? Sabemos que con Paul la fama lo motivó a hacer estupideces.
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