“Es mejor el libro que la película”, es la frase que constantemente escucho en boca de uno, dos o tres espectadores algo decepcionados y notablemente hartos de lo que acaban de ver al salir de la sala de alguna adaptación cinematográfica. Creo que es injusto hacer una comparación tan simplista cuando cada arte trata de aprovechar un lenguaje característico.
Si hay un elemento que comparten cine y literatura es que ambos hacen la diferencia entre trama e historia (o fábula). Esta segunda se refiere a los hechos totales en orden cronológico, del punto A al B. La trama implica el cómo se decidió contar la historia, y esa manera puede ser comenzando por el final, o in media res (a la mitad de algo).
Más allá de esa similitud, el cine tiene un lenguaje múltiple, multimedia que engrana palabra, audio e imágenes secuenciales. Una crítica cinematográfica debe considerar esta naturaleza mestiza.
Desgranemos siete aspectos específicos del cine para que no lo reduzcas sólo a qué cuenta, sino que des el giro de tu valoración al cómo lo hace.
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Fotografía
El video es el efecto generado por mirar secuencias de fotografías (cuadros). El cerebro humano logra procesar 24 por segundo para dar la sensación de aquello que se ve se mueve, más allá de ese umbral el efecto es el mismo; cuando se filma a 32 cuadros por segundo es para lograr un efecto de profundidad temporal ya que así se puede ralentizar la secuencia. Imagina que cada escena es una fotografía con su propia lógica y estética interna.
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Trama
Iniciamos en una situación de tensión casi al final de la historia, después regresamos a contar el porqué se está ahí, finalmente terminamos la historia explotando todo. David Fincher nos ayuda a entender la trama con ‘Fight Club’ (1999).
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Audio (Efectos de sonido)
Momentos de tensión pueden ser acentuados con efectos de sonidos o pueden hacer que se interpreten de otra manera con un tipo de efecto de sonido inesperado. El audio sumando a la calidez de la fotografía, genera la atmósfera. Una fotografía y una vibración punzante puede poner tenso a cualquiera.
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Iluminación
Este es un arte propio que se relaciona con la parte teatral del cine, pero afecta directamente a la fotografía. Efectos de luz, que se vuelven efectos de colores sobre el decorado y los actores; oscuros e iluminaciones que hacen fluir la narrativa. Algunas de las escenas más emblemáticas del cine son resultado de grandes decisiones en la iluminación. Para ‘The Revenant’ (2015), El Chivo Lubezki eligió filmar sin ninguna luz creada artificialmente, por ejemplo.
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Música
En una cinta, la música ayuda a que los discursos sean más poderosos. Ya sea original o con una amplia selección de canciones, el cineasta logra transmitir lo que se desea. Por ejemplo, un excelente curador de música es Quentin Tarantino; sus películas se vuelven entrañables por las canciones tan precisas que elige.
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Edición
La fotografía llevaba algunos años cuando el cine fue inventado y uno de los teóricos que exploró la posibilidad del montaje fue el soviético Serguéi Eisenstein, quien creía que al poner dos secuencias juntas, un tercer sentido surgía entre ellas. La edición de Jay Rabinowitz para ‘Requiem for a Dream’ (2000) es una de las más logradas, cada corte asemeja su estructura a la de una sinfonía.
Dirección
La labor del director es unir los elementos anteriores a la historia; debe asegurar que exista una armonía en el conjunto, es decir, que ningún elemento esté de más y que las diferentes técnicas apoyen a la película como un todo. Se pueden tener los mejores ingredientes, pero la dirección encamina la realización del proyecto.
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Ahora, que conoces el cómo, te darás cuenta que detrás de las dos primeras preguntas por contestar subyace una tercera, más profunda y evasiva: ¿por qué?
¿Por qué se prefieren hacer películas de superhéroes justamente cuando Estados Unidos lanza ataques bélicos contra otros países?, puede ser una pregunta a contestar. Esa diferencia entre saber cómo se hace y preguntarse por las motivaciones y el diálogo de las películas con el contexto del mundo y de su producción es la diferencia entre un ‘conocedor’ de cine y un ‘crítico’.
Edward Said, crítico cultural y profesor de literatura, pensaba que un crítico es un sujeto que pregunta, no que juzga.
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Ahora que sabes de técnica tal vez podrías revisar las ’10 películas que debes ver, según los críticos, para decir que sabes de cine’, y valorarlas por ti misma/mismo. Y si ya eres un cinéfilo consumado no puedes dejar de conocer estas ’14 películas que sólo querrán ver los verdaderos amantes del cine indie’.
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