Adèle sale despreocupada de su casa y pierde el camión para ir a la escuela, ya en clase sus compañeros leen fragmentos de La vida de Marianne escrita por Pierre de Marivaux. Una de las líneas que escuchamos parece ser la antesala perfecta para la cinta que toma vida frente a nosotros: “soy una mujer y cuento mi historia”.
La Vie d’Adèle – Chapitres 1 & 2 o Blue is the warmest color (2013) es una película dirigida por Abdellatif Kechiche. El filme está basado en la novela gráfica homónima de Julie Maroh, a través de la cual conocemos a detalle el desarrollo de Adèle (Adèle Exarchopoulos) en sus años de adolescencia. La reafirmación de la personalidad, así como el descubrimiento del amor y la sexualidad serán los temas que ocupen el día a día de la protagonista en su búsqueda por conocer el camino que debe seguir. La vida de la joven parece estar rodeada de un abismal vacío, las contradicciones y los miedos le impiden entregarse por completo a lo que le atrae.
A punto de cruzar una de las atiborradas calles de la ciudad, Adèle nota la presencia de una joven despreocupada y de cabello azul al otro lado. Al atravesar, sus miradas se cruzan, la fuerza de atracción hace que ambas volteen de manera abrupta para continuar el contacto visual. La luz de la secuencia y los primeros planos crean un momento de intimidad único. La casualidad del evento nos recuerda que la vida puede cambiar en cualquier segundo y que hay cosas que parecen estar predestinadas.
El encuentro hace que la protagonista se cuestione sobre su vida y sus deseos. Una serie de sucesos la llevarán a encontrarse de nuevo con la enigmática mujer del cabello azul, Emma (Léa Seydoux); pero en esta ocasión el poder de decisión y de acción de las jóvenes no dejarán que el encuentro sea de sólo unos instantes, sino que se convertirá en el inicio de una relación en la que el amor, el deseo y la infinita ternura dominen las emociones.
Kechiche nos muestra el desarrollo de la relación —y de las protagonistas como individuos— a través de capítulos definidos por sentimientos y sensaciones, llenos de primeras veces y también de últimas. Es consciente de que un ser humano es el resultado de sus relaciones e interacciones a lo largo de la vida, razón por la cual la familia es un factor determinante en dicha formación. Cuando conocemos a las familias de las protagonistas comprendemos las razones de su forma de ser y por qué evolucionarán hasta repetir ciertos patrones.
Además del desarrollo de los personajes, otro gran acierto de este filme es el uso de recursos visuales que se integran a la historia. Los colores de la cinta van en función de las emociones de Adèle. El azul es un color predominante en su vida, siempre se encuentra rodeada de elementos que asemejan al eléctrico cabello de Emma, es un tono con el cual se siente segura y arropada.
Todo parece ir viento en popa para la protagonista, su sonrisa enamora y conquista, no hay nada más genuino que la emoción de estar enamorado y su rostro lo refleja. Al fin se siente plena —al menos en ese momento de su vida—, ha encontrado la forma de ser feliz, ha decidido qué hacer de su futuro y está decidida a seguir con Emma. Una secuencia del cumpleaños 18 de Adèle nos permite ver, a través de su despreocupado baile, el momento de felicidad que vive. ‘I Follow Rivers’ de Lykke Li es la canción que suena mientras se mueve al compás de las líneas que pregonan su compromiso de seguir al otro hasta las profundas y azules aguas del mar.
Seydoux y Exarchopoulos llenan las imágenes de sensualidad y belleza. La calidez de la curva que se dibuja en sus bocas es suficiente para entender lo que sus personajes viven. La dupla de actrices también parece haber estado predestinada, sus gráciles movimientos llenos de naturalidad e ingenuidad son el eje que dicta el ritmo de la historia.
Pero todo en el mundo se acaba, los caminos se separan, hasta el más intenso azul se desvanece en las sombras de la soledad. El color que ha acompañado a Adèle durante su viaje se ha opacado y con él todo anhelo y esperanza. Todos los planes y la estabilidad han quedado en el olvido. A pesar de que un ciclo se cierra, la vida sigue. El título original de la cinta anticipaba el desenlace. La película es un vistazo a una etapa y la conclusión es solamente el final de un capítulo de muchos en la vida, ahora sólamente queda continuar el camino.
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