Parece un lugar común el hablar de cine y filosofía, y lo es. Lo es desde el punto en que por todos lados puede oírse sobre filosofía, y no necesariamente la que parte de la racionalización y problematización de la realidad y sus trascendencias. Se oye de “mi filosofía de vida es ésta”, “la filosofía de la empresa es, fulana de tal” y en el cine ocurre lo mismo, los lugares comunes se repiten y basta con decir filosofía, para creer que se filosofa.
La filosofía, efectivamente, se encuentra en todos lados; en la sabiduría popular, en nuestras relaciones sociales, en el trabajo, la familia, y esto es gracias a que las ideas son algo importante para la existencia humana. Las ideas vuelan en su mundo, y así como ocurre en todas las esferas de la vida humana, en el cine ocurre con una intencionalidad del creador, que le da la oportunidad de crear obras maestras en las que las ideas filosóficas pueden ser interpretadas, o simplemente ver el filme y decir “Me gustó”. Tenemos las dos oportunidades.
Algunos directores de cine, comenzaron su carrera en las letras, en las humanidades, ciencias sociales o propiamente en la filosofía; lo cual genera que sus discursos estén impregnados voluntariamente por concepciones ideológicas, filosóficas y hasta epistemológicas.
El cine como soporte de ideas por medio de narrativas, da la oportunidad de trabajar ficcionalmente y matizar por medio de todas las metáforas que sean necesarias. Lo anterior no significa que el filme será incomprensible o petulante. La complejidad del cine da cabida a que el director y su equipo hagan uso de las herramientas que en el cine se tienen para contar historias: la fotografía, el montaje, la música, la actuación y por debajo, el guión que nunca se ve pero que es la estructura de la que pende la obra.
Existen directores que ponen más énfasis en sus referencias filosóficas, lo que da por resultado que en ocasiones el espectador no tenga el vaciado necesario para poder interpretarlo, esto no es una limitación para poder apreciarlo ya que también por el cine puede conocerse y entender un poco de filosofía, que nunca hace daño.
Los directores de las siguientes películas, son aquellos a que su estética y narrativa van de la mano con distintas posturas filosóficas y de conocimiento. Quizá así comprendas un poco más el porqué de su obra. De igual forma todos tenemos un poco de hermeneutas.
–
Luis Buñuel
Director español, nacido en 1900 y recordado por las películas Los Olvidados, El ángel exterminador y El perro andaluz. Fue un asiduo lector de Lorca y de Bretón, de ahí su inclinación al surrealismo.
El ángel exterminador, es una película donde se pueden apreciar las inclinaciones ideológicas y filosóficas del director.
En esta película hace una fuerte crítica a su época, por medio de ciertas metáforas contadas en el interior de una casa elegante, donde se lleva a cabo un cena. Por azares del destino, nadie puede salir. Una de las interpretaciones del film apunta a que el director quiso reflejar la decadencia de la que eran capaces quienes no debían comportarse de esa manera. Su postura ideológica surge exponiendo a una clase alta mexicana llena de apariencias y poses, oculta tras las máscaras del catolicismo y las buenas costumbres.
–
Ingmar Bergman
Director nacido en 1918, es el representante del cine sueco, con películas como El séptimo sello y El ojo del diablo. Influenciado por el mundo metafísico desde su niñez, toda su vida estuvo marcada por conceptos luteranos, sin ser militante religioso.
La película ícono de este gran director es El séptimo sello, en la que retrata la realidad vivida en Europa, que devino de la crisis del siglo XIV.
https://www.youtube.com/watch?v=QnVbpq6vQfc
Dicha crisis estuvo marcada por el surgimiento de la peste bubónica y septiscémica, nombrada la peste negra. Consiste en la historia de un cruzado que después de pelear en Medio Oriente, regresa a su aldea en plena crisis, a partir de eso, tiene un encuentro con la Muerte. Un dato relevante es que la representación de la Muerte como la conocemos actualmente, la Parca con la hoz, deviene de la crisis europea del siglo XIV, momento en el que así se comenzó a representar. Bergman retoma la idea y confronta a Antonius con la Muerte. Ambos hacen un trato para jugar una partida de ajedrez, si Antonius gana, vive; si pierde debe irse con la Parca. Se sabe de manifiesto que el cruzado va a perder, a pesar de eso acepta, con la condición de que el juego podría prolongarse por días. La metáfora de la película es la representación de que la existencia humana en una tierra llena de horrores está condenada a morir, se nace para morir. Todos jugamos una partida de ajedrez con la Muerte, sabemos de antemano que no le podremos ganar, pero podemos aprovechar el tiempo que dura la partida, justo como Antonius Bock lo hace en el filme.
–
Jean-Luc Godard
Miembro importante de la Nouvelle Vague, de nacionalidad franco-suiza, se formó en la Sorbona de París en Etnología. Esto genera una conexión entre su discurso de izquierda y los acercamientos a las técnicas de investigación antropológica.
Las películas más representativas del director son, Banda aparte, Una mujer es una mujer y Pierrot le fou. Es un director muy prolífico.
En Una mujer es una mujer, el director plasma la vida de una pareja que entre el aburrimiento de la vida y su caos personal, entablan conversaciones sobre el sentido del amor y las distintas posibilidades de éste. Algo que es muy notorio en este film es la preocupación del director por los problemas comunicativos que los seres humanos enfrentamos, estos debido a que en las circunstancias más trascendentales como el amor, las formas convencionales de comunicar, parecen ser insuficientes. El hallar un mundo en donde quepan es otra de las preocupaciones existenciales que aquejan a los protagonistas.
–
Stanley Kubrick
De nacionalidad estadounidense, este director es para muchos el más influyente del siglo XX. Sus películas han sido incontable número de veces y están en el consciente de gran parte de los cinéfilos y aficionados.
Con 15 películas en su haber, todas pueden ser catalogadas como clásicos. Películas como Naranja Mecánica, Full Metal Jacket, 2001: Odisea del espacio y Ojos bien cerrados, son sólo unas de las más conocidas.
Una de las genialidades más grandes que ha dado el cine es la escena del despertar de la humanidad, en el que presenta el devenir de la especie; desde la horda hasta la llegada al espacio, pasando por la metáfora del hombre totémico y teocrático en que la figura fálica hace referencia a la cultura que rinde culto a lo divino. En el argot del cine, se llama elipsis de tiempo cuando se da un salto en el tiempo pero no se pierde la continuidad. En 2001: Odisea del espacio, ocurre en el momento en que el humano lanza el hueso y al final se convierte en la nave espacial. La elipsis explica, filosóficamente, que el hueso es la primera herramienta que el humano como especie utilizó, fue la primer tecnología hallada, la elipsis ocurre cuando la primera herramienta transmuta a la última herramienta del hombre en tiempos de Kubrick, el viaje espacial.
–
Andrei Tarkovsky
Cineasta soviético, nacido en 1932, es uno de las mentes más brillantes en cuestión de cine y teoría cinematográfica, asimismo es un excelente lector e intérprete de filosofía. De los grandes maestros de la Historia.
Su filmografía es compleja y a muchos pudiera parecerles aburrida. Tiende a lo contemplativo y a los planos de secuencia largos. Esto está relacionado con su teoría sobre “Esculpir el Tiempo”
Esta escena, extraída de El espejo, esta catalogada por muchos expertos como una obra de arte en movimiento. En sus películas, como se puede ver en el extracto, hace uso de planos de secuencia extensos, dando la sensación de ir esculpiendo el tiempo en el tiro. De igual forma es un cine muy abstracto en que los significados pueden hallarse en objetos que modifican el cuadro.
“El cine es una realidad emocional y, como tal, el espectador la percibe como una segunda realidad. Por este motivo, esa idea tan extendida de que el cine es un conjunto de signos me parece una idiotez, falsa en sus fundamentos.” Adrei Tarkovsky
La cita anterior refleja un sólo un poco de sus conceptualizaciones sobre el cine. Si bien sus películas están cargados de signos, la realidad real, por decirlo en palabras llanas, también lo está así que, la visión tarkovskiana, funda sus argumentos en que si bien la realidad no sólo es un cúmulo de signos, el cine tampoco lo es ya que éste se desprende de la realidad real.
–
Béla Tarr
Maestro del cine, de nacionalidad húngara, Béla Tarr, al igual que Tarkovsky, se encuentra entre los más abstractos y complejos.
El mismo ha mencionado que su testamento fílmico es El Caballo de Turín.
“No me llevo bien con los cineastas húngaros porque ellos son directores y yo no. Yo no sé lo que soy.” Béla Tarr
Basada en un pasaje de la vida de Nietzsche, en que al salir a la calle ve cómo un cochero golpea a su caballo incesantemente. Nietzsche se asombra de la brutalidad del humano por intentar conquistar la naturaleza y el mundo. Béla Tarr, retoma la historia y la lleva al extremo de qué es lo que le pudo suceder al cochero y al caballo que viven en una zona inhóspita. De acción pausada y contemplativa, el filme remite al ansia de un mundo, metafóricamente, cada vez más seco. La acción ocurre cuando un grupo de personas irrumpen en la cotidianidad desgastada y desgastante del cochero, el caballo y su hija. Una extensión de la filosofía nietzscheana, con una fotografía magistral.
–
Shane Carruth
De la lista es el más contemporáneo. Nace en Estados Unidos en 1972, y es de los directores actuales más interesantes.
Primer es su ópera prima, con la cual se consagra como uno de los directores más meticulosos al producir una película. Este film fue hecho con un presupuesto de sólo 7 mil dólares, donde de hecho él actúa.
Entra en la lista por la peculiaridad de que tiene una Maestría en Matemáticas, lo cual ha utilizado para escribir guiones de ciencia ficción, de igual forma, la manera en que planea la estructura de sus películas es digna de admirar y proveniente de una formación en la lógica-matemática.
Después de haber filmado Primer, se dedicó a planear con lujo de detalle su regreso al cine 10 años después. Su segunda película es Upstream Color. Primer es una historia que en verdad se necesita ver varias veces para comprender mejor la trama, en la que dos sujetos descubren por accidente el viaje en el tiempo y comienzan una serie de loops en los que -a aparte de la precisión matemática -, se perciben halos de problemas existenciales debido a la generación de Döppelgangers (dobles), quienes toman un lugar en su vida.
Se inserta en esta lista, ya que la lógica-matemática y sus problemas, muchas veces son derivados o complementos de abstractos provenientes de la filosofía y la ontología, y viceversa, muchas de las teorizaciones matemáticas se abordan desde el plano de la filosofía.
–
Son directores muy poco vistos por la gente y que en definitiva tienen el aura de ser directores de “culto”, con los cuales no sólo basta con ver la película, sino tener ciertos antecedentes que puedas utilizar para poder verlas. A pesar de esto, el cine como arte, no se le niega a nadie y son una buena forma de aprender a observar más allá de las explosiones y los grandes efectos especiales.
***
Te puede interesar: ¿Cómo ver una película de Tarkovsky sin morir en el intento?