Es verdad que en los últimos años el cine haya dado pocas manzanas dulces, sin embargo, habría que considerar también la posibilidad de que todo se deba a que la audiencia también ha cambiado. Es decir, a la mayoría del público le gustan las tramas sencillas, algo que no requiera un esfuerzo mental más allá de la contemplación y las risas, por lo tanto cuando se enfrentan a cintas en las que hay que ver más allá de lo que se presenta en pantalla lo único que pasa es que odian lo que ven.
Las siguientes películas pertenecen a esa categoría polar, es decir, o las amas porque viste a profundidad o las odias porque parece que no aportan nada al mundo.
Apocalypto (2006)
Mel Gibson
Los historiadores le dieron una nota malísima porque no es un documento confiable, es decir, la cinta no ofrece una visión histórica verídica sobre la Conquista y los posteriores eventos en el continente Americano. “Violenta, sangrienta innecesariamente y llena de drama”, así la calificaríamos. Sin embargo, no hay que olvidar nunca que el panorama de Mel Gibson sobre este evento histórico es similar al del resto del mundo, además de que su intención no fue realizar un documental sino una pieza de ficción y entretenimiento.
mother! (2017)
Darren Aronofsky
Siempre hay un breve momento de suspenso al iniciar una cinta de Aronofsky. La razón es que no es un director que haga películas para las masas, las realiza sin pensar en su recibimiento y mucho menos en la crítica. mother! es la perspectiva personal del director sobre el fanatismo y los sucesos religiosos. Por supuesto, las críticas a este sistema pocas veces son toleradas. Sin embargo, es una cinta bien realizada y el elenco hace una magnífica actuación.
Viridiana (1961)
Luis Buñuel
Al igual que con mother!, Viridiana es un retrato surrealista y crudo del bien y el mal. Como madre de los marginados, Viridiana pretende darles una vida digna en el interior de su hogar, pero lo que se encuentra en el camino de buenas acciones no es para nada lo que esperaba, así que su espíritu termina corrompiéndose. La religión siempre es un asunto delicado, pero la versión de Buñuel va más allá al exponer todos los vicios presentas en las “buenas” personas.
https://www.youtube.com/watch?v=n46WtVCWsk4
La La Land (2016)
Damien Chazelle
Este homenaje cinematográfico fue un giro de 180 grados en comparación con la primera obra de Chazelle. Al público le pareció perfecta por la trágica historia de amor, pero eso fue justamente lo que la crítica rechazó. No obstante, visualmente es una cinta que tiene mucho que ofrecer al recrear escenarios del cine clásico norteamericano.
La dolce vita (1960)
Federico Fellini
Para empezar, es una cinta de larga duración, eso ya es para algunos una especie de prueba de resistencia. En su año de estreno fue bien recibida porque el contexto de entonces estaba listo para una producción como ésta. Actualmente pertenece a los clásicos imperdibles del cine y apta únicamente para determinado público considerando los cambios de ideología y de estilo de vida.
Nymphomaniac (2013)
Lars von Trier
La forma de glorificar esta condición mental fue para Von Trier un ejercicio de reivindicación de la sexualidad. En el argumento se presentan dos líneas y dos perspectivas sobre la ninfomanía: una representación de los vicios y la maldad, y otra es la condición humana como tal, que está totalmente incapacitada para manejar los desvíos de la vida. No es la primera vez que el director pone en jaque tanto al público como a la crítica, es más bien una costumbre que sus obras provoquen este tipo de reacciones.
The Revenant (2015)
Alejandro González Iñárritu
Para algunos esta totalmente sobrevalorada en primer lugar porque no tiene una aportación real a la historia del cine, según la crítica no valía la pena adaptar esta historia, por lo cual representa un capricho cumplido del director. Los detractores dicen que de lo único que se trata es de bellas tomas panorámicas muy a lo National Geographic. No obstante, hay que resaltar que Iñárritu logró explotar la capacidad histriónica de Leonardo DiCaprio. El hecho de aprovechar en toda la extensión de la palabra el talento de los actores es algo que a veces los directores dejan de lado.
Hereditary (2018)
Ari Aster
El terror es un género poco valorado entre la industria ya que la mecánica en su realización está un poco al margen del resto de las producciones. Es muy poco común que una cinta de terror sea apreciada más allá de si asusta o no. En caso de esta cinta no se separa de esta segregación, con la diferencia de que la trama es un poco más compleja y se habla de temas como la ética, la moral, la familia y la muerte como proceso, no como destino. Así que si fue nombrada la película más aterradora del 2018 es porque hay algo muy bueno en ella.
Birdman (2014)
Alejandro González Iñárritu
Se trata de una crítica al nihilismo hollywodense, un tema muy “apropiado” para una cinta multipremiada. No obstante, para los fans del director se tata de una película pretenciosa sin objetivo aparente. El hecho a resaltar es que esta obra es el punto más alto de la evolución de Iñárritu como creador.
Roma (2018)
Alfonso Cuarón
Es una película intimista y privada, no hay más. Acostumbrados a la acción y a los picos altos en las líneas dramáticas la cinta puede resultar tediosa si no se aprecia como lo que es un, en pasaje de una típica familia mexicana de clase media alta, casi como una parte del diario íntimo de Cuarón. Sin embargo, aunque no sea nuestra vida la que está reflejada el director logra escenas impactantes que te permiten identificarte con los personajes, y es ahí donde se cumple el objetivo de esta película.
https://www.youtube.com/watch?v=wM_TFwLRQAY
Hay que situar cada cinta en su contexto y tener presentes ciertos elementos básicos, de lo contrario cualquier película que veamos nos será imposible de apreciar y de entender.
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