Ni el “gen Borbón”, como se le llama a aquello que lleva a ser infieles a todos los miembros de la familia real, pudo separar a Don Juan Carlos y Doña Sofía. Quienes siguen juntos a pesar de las numerosas veces que el antiguo Rey de España (1975-2014) le fue infiel a su esposa. Pero ¿por qué nunca se divorciaron a pesar de las múltiples aventuras que quebraron el corazón de Sofía? Al parecer, la infidelidad es una tradición a la que se deben atener las parejas de los integrantes de esta familia. El “gen Borbón” lo padecieron don Juan, el padre de don Juan Carlos; Alfonso XIII; incluso, la reina Isabel II de Borbón. Por lo que todos se preguntan si a la reina Letizia le espera lo mismo, pues los herederos de la corona española son conocidos por su nula convicción para serle fieles a sus compañeras de vida.
Aunque no todas las historias sobre infidelidad son tan interesantes y glamorosas como las de la realeza de España, existen otras mucho más dramáticas que te harán repensar si estás dispuesto a serle infiel a tu pareja. Desde venganzas sanguinarias, hasta desenlaces traumáticos, son parte de algunas películas en las que la infidelidad paga con creces. Ya sea porque alguna de las partes se aferra a remendar el error o porque la persona engañada se propone castigar a quien la defraudó, los desenlaces de estas historias son –más que una lección– una advertencia para todos aquellos que han imaginado o intentado involucrarse con alguien, a pesar de tener un compromiso sentimental.
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“Third Person” (2013)
Paul Haggis
¿Cuánto vas a llorar?
Tanto como duele implorar que el tiempo retroceda, sobre todo cuando el error cometido es irreversible.
¿Qué vas a aprender?
Que el tiempo jamás se recupera, que pedir perdón y aprender a perdonar le devuelve la libertad a quien ha mentido y a quien han desilusionado.
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“American Beauty” (1999)
Sam Mendes
¿Cuánto vas a llorar?
Igual que todas las veces que has tenido que despedirte de alguien con quien habrías podido compartir el resto de tu vida.
¿Qué vas a aprender?
Que el deseo sexual a veces puede más que cualquier cosa; no obstante, la carnalidad no evoluciona como el amor lo hace.
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“Match Point” (2006)
Woody Allen
¿Cuánto vas a llorar?
Todo lo que necesitas después de herir, irreparablemente, a quien compartió todo contigo.
¿Qué vas a aprender?
Que la vida y tu felicidad es el cúmulo de decisiones que tomas todos los días.
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“Breathe In” (2014)
Drake Doremus
¿Cuánto vas a llorar?
Igual que la primera vez que alguien te dijo una verdad dolorosa e inolvidable.
¿Qué vas a aprender?
Que enamorarte apasionadamente jamás será comparable con el amor que surge de un compromiso consolidado.
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“Cruel Intentions” (1999)
Roger Kumble, Scott Ziehl
¿Cuánto vas a llorar?
Tanto como la primera vez que te descubrieron mintiendo para aprovecharte de la situación o para librarte de tus culpas.
¿Qué vas a aprender?
Que todo lo que hagas, las personas que afectes y la forma en que intentes conseguir tus objetivos, repercutirán en tu futuro de manera directa e importante.
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“Unfaithful” (2002)
Adrian Lyne
¿Cuánto vas a llorar?
Igual que la primera vez que te rompieron el corazón.
¿Qué vas a aprender?
Que el ser humano no es perfecto y que su instinto lo ha llevado a cometer grandes equivocaciones, pero también lo ha ayudado a descubrir las verdades más valiosas.
https://www.youtube.com/watch?v=iJkHQiL0gUM
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“Canon” (2014)
Mauricio Walerstein
¿Cuánto vas a llorar?
Tal vez como esa vez que intentaste pedir una segunda oportunidad, aun cuando sabías que no te la merecías.
¿Qué vas a aprender?
Que el tiempo ayuda a cerrar heridas, pero eso no significa que todo pueda volver a ser como antes.
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“La habitación azul” (2002)
Walter Doehner
¿Cuánto vas a llorar?
Como el día en el que te diste cuenta de que por más que lo intentaran, tu pareja y tú no tenían ningún futuro juntos.
¿Qué vas a aprender?
Que todo se acaba, pero que la vida está conformada de ciclos que se repiten una y otra vez.
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La infidelidad, tristemente, se ha convertido en una situación y/o decisión subjetiva. Para algunos, tener relaciones sexuales con alguien que no es su pareja no representa, en absoluto, una acción desleal. Para otros, sólo cuando se relacionan los sentimientos con el engaño, es cuando realmente se es infiel. Las mentiras han existido desde que el hombre pisó la Tierra, pero el sentido común y la sensibilidad también ha evolucionado desde ese momento. Así que ¿en verdad es imposible detenerte a pensar si lo que estás a punto de hacer no lastimará a tu pareja o a ti mismo?
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Referencias
Netflix
El Mundo
El Universo
