Diego Luna es uno de los actores más prometedores del cine mundial. Su participación en Rogue One: A Star Wars Story le ha valido cientos de seguidores en sus redes sociales, el amor de realizadores reconocidos mundialmente, un lugar completamente sólido en el cine Hollywoodense y, por supuesto, el valor a su trabajo, el cual le ha costado años de dedicación.
No obstante, como todo ser humano, Luna tiene algunos errores que han hecho que su carrera sea tan versátil como la de cualquier otro actor. Empezando por su primeros años en la actuación, cuando aún interpretaba a un pequeño niño con sobrepeso en una telenovela protagonizada por “Güicho Dominguez”.
Conforme pasaron los años, la dedicación que le puso a su trabajo mejoró notoriamente, ya que comenzó a hacer películas de alta calidad que le valieron premios y el reconocimiento de críticos, directores, actores y cinéfilos. Luego de haber hecho Y tu mamá también, Guillermo Arriaga, el guionista por excelencia del cine mexicano decidió que era hora de volver película una de sus novelas más aclamadas, El búfalo de la noche, por lo que contrató al venezolano Hernández Aldana para dirigirla y a Diego Luna para protagonizarla. El resultado fue un completo desastre que derivó en una película poco entendible y llena de misterio. No desarrolla un argumento sólido y confunde la audiencia al grado de dejar a Luna en el ridículo total.
Ante la poca aceptación del público y los especialistas, Diego Luna no pudo hacer nada, más que esperar a que pasara la mala fama del filme. Con todo lo malo que puede tener esta tropezada película, es mucho mejor que cualquier cinta mexicana actual y no porque no haya buenas propuestas y directores, sino porque el éxito comercial de cintas de corte cómico-romántico se ha vuelto tan apabullante para los actores mexicanos, que en cuanto comienza a tener reconocimiento, estos huyen del país, como lo hizo Luna, Gael García, Damián Bichir o Damián Alcázar.
A decir verdad, las comedias en México tienen tan baja calidad que somos víctimas de homenajes mal realizados, historias que supuestamente son el reflejo de las aventuras de cualquier adulto joven del país o de ideas poco centradas de lo que es la situación actual de nuestra sociedad.
No obstante, podemos entender la decisión de Luna de dejar al país, ya que con filmes de la calidad del El búfalo de la noche y la inversión millonaria que se le otorga a las producciones de poco argumento sólo nos queda pensar en que México, en el afán de tener una industria cinematográfica reconocida, es capaz de sacrificar elementos en verdad importantes para obtener un poco de atención, versatilidad y nuestra atención. Factores que se traducen en vergüenza: palabra que describe las siguientes 10 películas que en verdad quisiéramos olvidar.
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Niñas mal (2007)
Fernando Sariñana
No. Nadie necesitaba de un filme en el que describieran cinco absurdas personalidades de la juventud femenina en México de principios del siglo XXI. Martha Higareda, como es costumbre, luciéndose en el mismo papel de siempre que sólo mueve en cada filme, acompañada de un squad tan estereotipado que parece más una copia de cualquier chick flick estadounidense que un reflejo de las chicas irreverentes de México. Desde el nombre de la cinta, va todo en la dirección equivocada.
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Te presento a Laura (2010)
Fez Noriega
Esta película nació de la mente de Martha Higareda. Si no actúa bien, mucho menos sabrá escribir. No es un mal argumento, pero es una mezcla de clichés que caen en la aburrición que más que entretener, causa molestias, no por irreverente, sino por mal pensada y realizada. La felicidad es el tema central de estas películas y no es más que una idea mal planteada y poco fructífera.
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La misma luna (2008)
Patricia Riggen
En el afán de querer empatar con el lado romántico y triste de las personas, esta película pretende unir a Eugenio Derbez, Kate del Castillo y un pequeño niño que vive un calvario en busca de su mamá que se ha ido a Estados Unidos. La trama es increíble y la migración no es tan fácil y de color rosa como se presenta en la vida real. Además, juntar el factor Derbez y Del Castillo, solo puede tener un resultado negativo.
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Paradas continuas (2009)
Gustavo Loza
La imaginación no tiene límite, pero en verdad, esta película es una verdadera catástrofe. Una van que viaja por el país dedicada a que las parejas tengan sexo dentro de ella es un argumento sin sentido. Las aventuras de los propietarios de la misma sólo se pueden pensar como un chiste mal contado, ya que no hay más. No hay crítica o una referencia al amor. No tiene nada que ofrecer.
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Cásese quien pueda (2014)
Marco Polo Constandse
El argumento pretende mostrar la unión entre hermanas y el sentimiento común de todas las mujeres de México sobre el matrimonio y la vida en pareja. Es lógico que todas quieren vivir una vida feliz, pero no todas anhelan casarse y vivir aventuras de despechadas junto a su hermana. Este guión fue escrito por Martha Higareda quien de nueva cuenta, pretendía dejar huella en el cine mediocre.
¿Qué culpa tiene el niño? (2016)
Gustavo Loza
Karla Souza en una buena actriz que ha sido encasillada en el papel de la chica fresa que causa risa, pero en definitiva, este filme no es una proeza en la cinematografía. Su papel en Nosotros los nobles fue divertido, pero quererla poner en el mismo lugar en cada película mexicana resulta tedioso y predecible. Esta película explora el alcoholismo como una aventura divertida, y la falta de protección y educación sexual como un descuido gracioso que deriva en un final absurdo y, aunque resulta un poco predecible, el resultado no es nada positivo.
No se aceptan devoluciones (2013)
Eugenio Derbez
Los que la vieron terminaron con una lágrima colgando del ojo, pero ¿en verdad lo merecía? El humor de Eugenio Derbez empezó siendo crítico, divertido y ácido, desafortunadamente mutó a la simplicidad que cae en lo absurdo. No da risa, usa el sentimentalismo como arma principal y en realidad es una falacia, sin contar que Derbez cree que es un atractivo e irresistible hombre y lo plantea de esa manera en este proyecto que tardó 10 años en poder realizarse.
Cansada de besar sapos (2006)
Jorge Colón
Aunque es un buen argumento para hacer que las mujeres se atrevan a disfrutar de su vida sexual y vivan libremente, termina siendo un cliché más en el que nos dicen que deben tener un amor verdadero por el cual luchar. No es un mal filme, hasta que vemos los estereotipos en cada personaje. En realidad aporta mucho a la cinematografía mexicana.
Hazlo como hombre (2017)
Nicolás López
Martha Higareda está comenzando a verse mayor para los filmes de chicas irreverentes y románticas, por lo que está cediendo su lugar a Aislinn Derbez quien no actúa si no es con su esposo, Mauricio Ochmann. Una vez es pasable, pero ver que todas las películas en las que participa tienen el mismo argumento y que a su lado estará el mismo chico que tampoco luce tan joven, es un ciclo que ya nadie quiere repetir. Esta historia cuenta con supuesta ironía el tema de la homosexualidad, el verdadero amor (que termina siendo la pareja heterosexual) y la inclusión de género.
Pink (2017)
Francisco del Toro
Este filme no es más que una absurda critica a la homosexualidad. Alimenta la homofobia y el machismo que se ha dado en México desde su independencia. Afortunadamente, poco a poco se ha ido erradicando, así que cuando cintas como ésta llegan a las salas de cine, únicamente causan aberración. No sólo pretende decir que la homosexualidad es una enfermedad curable gracias a la religión; sino que ofende abiertamente a la comunidad gay. Fue retirada de cines y de plataformas como Netflix.
Diego Luna quisiera olvidar aquella etapa en la que era un niño regordete que aparecía en telenovelas ridículas con tal de impulsar su carrera, o ese filme de Arriaga que tuvo mucho fondo y poca forma. Igual que el público mexicano quisiera olvidar el desastre cinematográfico en el que estamos sumidos gracias a la necesidad de sobresalir en el mundo como industria. Desafortunadamente, por mucho tiempo fuimos bien recordados por filmes como Macario, El ángel exterminador o La Diosa arrodillada por mencionar algunas.
Hoy nos conocen en el mundo por tener actores como Diego Luna, un atractivo y muy talentoso chico que conquistó a Katy Perry y a Disney por igual. El actor es una gran muestra de que el cine en México no está muerto y que sólo necesita apoyo para revelar el verdadero talento de los actores y crear una historia concisa y contundente.
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Estos filmes demuestran que a veces, el mundo ve a la homosexualidad de manera equivocada como lo hace Pink, la cual tiene mucho más detrás que un simple argumento anti gay, es mucho más absurdo, cabe señalar.