Pizza con sandía, prueba esta combinación inesperada pero deliciosa y saludable

No sé si es la edad o qué me sucede pero cada vez que como pizza me da mucha culpa. La amo con todo mi corazón pero pensar que es demasiada masa dentro de mi cuerpo me pone mal. Mi metabolismo ya no es tan bueno como hace unos años y con tantito que coma mal, pum, subo mil kilos.

Pues paseando por el internet, encontré una pizza saludable, sí, s a l u d a b l e. Dije ¡ñaaaa! todo lo saludable sabe feo, pero en mi afán de no sentir culpa pues ahí me tienen intentándolo y W O W, tenía que platicarlo por acá.

Se trata de una pizza con los ingredientes normales: mucho queso, salami, pepperoni o lo que quieras, pero la base es ¡una sandía! se ve igualita a una normal pero qué sorpresa te avientas cuando descubres que no tiene masa. Amigos, ahí me tienen creyéndome MasterChef y me salió divina. Yo le puse pepperoni y muchísimo queso porque soy la loca del queso y ¡me la eché todita! o sea no era muy grande, pues, pero cero me dio culpa y no inventen lo deliciosa que estaba.

La sandía le da un toque fresco y acuoso que me encantó, así que decidí hacerla de nuevo para una reunión familiar y señoras y señores, recibí muchos comentarios de ‘ya te puedes casar’, saben lo que significa.

Les voy a dar la receta pero les advierto que es al tanteo, eh, ustedes vayan viendo qué ingredientes ponerle para personalizarla y van a ver que me van a adorar.

Ingredientes:

Sandía (si no quieres tanta puedes pedir solo la mitad, se usa una rebanada)

Queso, el que quieras, que se pueda derretir sabroso.

Salsa de tomate.

Los ingredientes que quieras, yo le puse pepperoni y compré un paquetito, traía como 10 rebanadas pero tú le puedes poner lo que se te antoje como salami, salchicha, pollo, carne molida o hacerla veggie con champiñones, aceitunas, pimientos o lo que quieras.