Todos sabemos que una de las maravillas de este precioso país es su gastronomía tan sabrosa y cuando a eso le sumamos el ingenio del mexicano para inventar y renovar platillos, los resultados pueden llegar a ser espectaculares, asombrosos y deliciosos. Hemos visto quesadillas en forma de dinosaurios, micheladas de mole, hamburguesas de chile en nogada y quién sabe cuánta cosa más. Hoy tengo una receta que fusiona dos de mis antojitos favoritos en el mundo de la tragadera: chilaquiles y tamales (mi favorito es de verde). Ajuuuua, así es, nada de torta de chilaquil, vamos un paso más allá. Se ha creado el tamal de chilaquiles.
Yo sé que suena muy atascada esta onda pero la verdad creo firmemente que vale la pena probarlo por lo menos una vez. Aparte todo lo que lleve crema, chile, salsa, queso y masita, es garantía, ¿sí o no? La verdad es que no hay nada como mi querido México, mágico, glotón y delicioso de mi amor. Te voy a contar cómo hacerlos porque aquí no nos vamos con rodeos. Estoy para eso, mi buen amigo, para guiarte por el camino de la tragadera, porque no basta con comprarlos, sino vamos a hacer todos los tamales de chilaquiles que nuestra panza quiera.
Receta de tamales de chilaquiles
Ingredientes
Procedimiento
Foto: Cocina fácil
Qué cosa tan deliciosa, de verdad estoy salivando. Es más, ármate un desayuno con los compis y sorpréndelos con este platillo tan glotón.
¿Cuál es el origen de los tamales?
Pues el origen de los tamales está en discusión porque todos queremos alzarnos el cuello y decir que lo inventamos, pero esta batalla la traen Chile, Perú, Argentina y Bolivia. Sí, así como lees, México se deslindó aunque algunos historiadores aseguran que en nuestro país se hicieron los primeros tamalitos. Específicamente en el centro por ser la región del origen del maíz.
¿Cuál es el origen de los chilaquiles?
El maíz y el chile eran ingredientes primordiales en la gastronomía prehispánica pero no hay un origen claro de los chilaquiles en esa época. Fue hasta 1821 donde se registró la primer receta de lo que conocemos hoy como chilaquiles porque recordemos que el queso, la cebolla y la crema llegaron con los españoles. La receta original es un poco más compleja que la que usamos actualmente. Se lee así en el libro ‘Arte nuevo de cocina y repostería acomodado al uso mexicano’:
“Se cuece carne de puerco y chorizos (pero éstos no se echan hasta que la carne esté a medio cocer), se fríe todo y se aparta del fuego: se tiene pronto el clemole, las tortillas y el ajonjolí tostado; Debes poner la capa de carne y se tapa con tortillas; se le echa caldo de clemole y un puñado de ajonjolí; de este modo se hace con las demás: se les echa manteca de la regular porque las tortillas la embeben mucho.”
¿Qué tal? Ahora, muchos años después, seguimos modificando las recetas y las unimos para tener estas dos delicias en una: los tamales de chilaquiles.