El rostro de Audrey Hepburn es conocido por su calidez, ternura y belleza. Sus rasgos dejaron huella en el cine luego de que sus redondos ojos, nariz afilada y mejillas delgadas iluminaran las escenas del documental Dutch in Seven Lessons. Desde entonces se convirtió en una de las mujeres más enigmáticas de la historia, ya que no era una actriz que se mostrara transparente, es decir, no hacía pública su vida y tampoco la exhibía sin razón. Ella practicaba muy bien el arte del enigma.
Ante ello, no faltó quien la investigara para lograr descifrar lo que estaba detrás del glamour, la elegancia y la naturalidad que emanaba por cada poro de su cuerpo. De este modo, la grafóloga profesional Sandra Cerro encontró en la personalidad de Hepburn mucho más de lo que su angelical rostro decía ante las pantallas. En el filme Historia de una monja, Audrey escribe una carta de puño y letra, lo que le permitió a la profesional hacer una investigación mucho más profunda. Así, descubrió que era una mujer serena que jamás perdía el control de sí misma, y aunque tenía un alma aventurera, se resistía a dejarla salir por temor a ser herida. Era también una mujer fácil de amar, pero que no le brindaba su amor a cualquiera, era selectiva. Su amabilidad superaba todo y era una gran partidaria y amante de la generosidad.
Ella escribía algo suelto, es decir, unía algunas letras, el espaciado entre palabras era largo y las letras no estaban del todo completas; si embargo, eran redondas y grandes. Por lo tanto, sus palabras se entrelazaban, justo como ella lo hacía con las personas con las que convivía, se relacionaba, se mezclaba, se involucraba con su gente y entregaba todo. Con sólo ver su letra, Sandra Cerro encontró algunos aspectos de la actriz, por lo que tú también puedes aprender a definirte mejor conociendo tu personalidad a través de tu escritura.
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Tamaño de la letra
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Espacio
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Inclinación
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Forma
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Puntos en las letras
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Cruz en la T y J
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Cómo cierras la O
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Velocidad y fuerza
Escribe y luego trata de definir tu personalidad. Tú te conoces, es cuestión de hacerlo un poco más profundo a través de tu escritura y demostrar que, muchas veces, hay algo más dentro de cada persona. No siempre serás plenamente tú, en ocasiones esconderás algunos detalles, pero tu letra los dirá todos y no hay nada de malo en ello. Recuerda que debes reunir todas las características que tenga tu forma de escribir y sólo así lograrás definir tu personalidad tal cual es. Te sorprenderás de todo lo que tu letra dice de ti.