¿Sabes cuál es la diferencia entre ambas definiciones?
Es sencillo: si intentas seguir un manual, jamás lograrás soltarte por completo. Sin embargo, si te dejas llevar conociendo tus límites y los de tu pareja, entenderás que te puedes convertir en un ser erótico mucho más fácil de lo que parece. Aunque quizá no sepas exactamente qué implica el erotismo.
Es una pieza clave en el romance. Sin ello las relaciones sexuales no podrían ser satisfactorias, por lo que –según los sexólogos– el erotismo significa experimentar un amor apasionado, un fuerte e intenso deseo carnal. Implica sentirse sexy, deseado, amado y necesitado de alguna manera. No obstante, también significa darle al otro lo que desea; es decir, tratar de complacerlo por muy complicado que parezca.
La primera parte es la aceptación propia. Si eres capaz de verte al espejo aceptando tus estrías, los rollitos que se asoman en tu cintura, tu cabello de sirena o tus curvas pronunciadas, entonces serás capaz de hallar placer hasta en los fetiches más extraños de tu pareja… como lamer los pies, morder el cabello o estimularse con un envase.
A veces, esta aceptación implica creer en sí mismo, en los deseos reprimidos y en todo aquello que puede parecer una locura, pero al final resulta ser mucho más placentero que cualquier otro estímulo.
Si deseas tener sexo con una mujer, bailar en la ducha o probar nuevas posiciones, plantéalo y, sobre todo, inténtalo.
Cuando una pareja se logra complementar entre sí es cuando llega ese punto en que el erotismo se termina de formar, no es una simple acción más, es una actitud que en realidad pocos han logrado experimentar.
Pero más allá de encontrarte en confianza contigo mismo para lograr una empatía en pareja, es una forma de ayudarse ambos, aunque cabe señalar que debe haber reciprocidad en cuanto a las experiencias, por ello, si te gusta el porno, pídeselo, si te gustan los tríos, no dudes en solicitarlo.
La clave principal es no quedarse callado y encontrar el momento justo para llevar a cabo los deseos más íntimos; para saberlo, bastan sólo algunos detalles que son de gran ayuda, por ejemplo, los aromas, alguna película, las caricias, el entusiasmo y claro, la disponibilidad de ambos, pero eso ocurre solo. Es decir, cuando hay deseo y amor entre los dos, esto sale —casi— sobrando.
Una pareja sabe que puede disfrutar de su sexualidad cuando ambos se sienten cómodos y cuando no necesitan de otros estímulos, al menos no por mucho tiempo.
Y luego de toda esta explicación que tal vez te aburrió, debes saber que una pareja plena puede ser tan erótica como quiera. ¿Qué importa si el deseo es inmenso o si baja de intensidad? Cuando hay una combinación y empatía con la pareja, hay una gran necesidad de afecto y de cariño que ni siquiera tienes que pedir, está ahí y no se va.
Entonces sabes que eres una persona erótica, llena de ideas y de grandes pasiones.
No tienes que hacer nada más que disfrutar de tu pareja y de tu vida. De tu amor propio y de la necesidad de dar y recibir placer. Sólo así, una vez entendiendo y teniendo claro lo que en realidad deseas, será mucho más sencillo para ti soltarte en la cama, porque los deseos más ardientes son, sin duda, los más sinceros y es en esos momentos cuando entiendes el verdadero significado del sexo.
Justo como en estas imágenes que con trazos poco definidos, escaso color y situaciones comunes, Bill Sussman se ha dedicado a plasmar los más íntimos deseos de una persona.
Sussman es un ser erótico y lo descubrió cuando entendió que el deseo y el amor a veces no van de la mano, pero se complementan como dos cuerpos ardiendo en pasión. Así, con dibujos a lápiz que después digitaliza —en la mayoría de los casos— se ha convertido en uno de los ilustradores más controversiales de la red puesto que muestra como nadie el verdadero significado del erotismo y la necesidad de afecto, de amor y de comprensión por medio de caricias, una cama o cualquier escenario excitante y digno de presenciar una jornada de intenso sudor y pasión.
De este modo, el verdadero significado del erotismo lo das tú, lo da tu pareja y lo da la situación. No sigas reglas ni patrones, sólo déjate llevar y permite que Bill Sussman te seduzca con sus recreaciones de la sexualidad y —sí, otra vez— erotismo que todos deberíamos experimentar alguna vez. Ahora sabes que la actitud es mucho más que la acción.
Sigue su trabajo en su página web.
