¿Eres una de estas personas? No te preocupes… tu secreto está guardado entre nosotros. ¿El tatuaje que tienes te lo grabaste para formar parte de un grupo o porque todos tus amigos ya tenían uno y te sentiste presionado? En serio, nadie se enterará de ello. Finalmente somos seres que, sin darnos cuenta, todo el tiempo intentamos formar parte de un grupo.
El sentido de pertenencia nos guía a buscar el cobijo y la aceptación de un núcleo familiar, social o profesional, el que nos proporcione apoyo, cariño o seguridad para encarar las situaciones más complicadas o festejar los momentos especiales. Diversos rituales de aceptación se llevan a cabo para conseguirlo y en esta ocasión tú sacrificaste un poco de tu dinero y tiempo para hacerte un tatuaje que te coloca en sintonía con un grupo.
Querías encajar a como diera lugar o llamar la atención y es admirable que te hayas llenado de valentía no para soportar el dolor de la aguja, sino por hacer algo tan valiente como dejar de lado tus ideales y realizar algo sólo por ganarte la aprobación de tus amigos tatuados. Tranquilo, nadie va a decir tu nombre, sólo mencionaremos las señales que te han delatado como alguien que lleva tinta en la piel con el único objetivo de formar parte de un grupo. Tu ejemplo les enseñará a los demás que un tatuaje debe portarse por convicción personal y no por presión social.
Señal 1: te tatuaste algo parecido a lo que todos tienen
En el mundo de los tatuajes hay tendencias. Entre los marineros del siglo XIX, por ejemplo, se usaban los tatuajes de barcos para mostrar a los demás la nave a la que orgullosamente pertenecían. Hace una década o más se pusieron de moda los diseños tribales. En la actualidad, los diseños minimalistas o de dibujos de trazos sencillos están en la piel de muchas personas. Si optaste por grabarte en la piel algo parecido a lo que tus amigos portan, tal vez hubiera sido mejor idea hacerte algo más personal, y hacer una diferencia entre tú y ellos.
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Señal 2: pediste opinión en redes sociales para elegir el diseño
Nadie tenía por qué decir si lo que te ibas a tatuar era bueno o malo, muy grande o muy pequeño, desagradable o bello, anticuado o moderno. Un tatuaje debe tener significado sólo para ti, los demás sólo serán meros espectadores del resultado final. Al exhibir las opciones de diseño en redes sociales, sometiéndolas a votación, sólo demostraste que querías satisfacer a los demás y no a ti. Es probable que también quisieras hacer evidente a tu círculo de amigos que por fin ibas a encajar por completo con ellos.
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Señal 3: tu tatuaje no tiene un significado específico pues te enfocaste en que su estética le agradara a todos
De acuerdo, un tatuaje también está en la piel por estética, pero más que un adorno es una muestra de tus sentimientos y pensamientos más arraigados en el corazón. Si elegiste tatuarte el diseño de una rebanada de pizza, un curita, un barquillo de helado, corazones en las rodillas o algo similar hubiera sido mejor idea que ya que querías encajar en un círculo determinado eligieras un diseño que hablara por tu interior, que contara una historia de tu vida y te recordara una idea importante.
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Señal 4: publicaste todo el proceso de tu tatuaje en redes sociales
Desde que te levantaste de la cama hasta el resultado final, pasando por tu llegada al estudio y todo la sesión de tatuaje, tu cuenta de Facebook y otras redes sociales se llenaron de lo que experimentaste durante la realización de tu primer diseño. Ésta fue otra evidencia de que estabas enfocándote más en que los demás se enteraran de lo que hacías que en el significado natural de estrenar un tatuaje. Cuando portas un diseño en la piel lo disfrutas a solas, sabiendo que lo que has hecho es un recordatorio de lo que eres y no de lo que los demás opinan sobre tu acción.
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Señal 5: te la has pasado diciendo que tienes un tatuaje
Ya que estrenaste tu diseño, el siguiente paso que diste fue gritar a todas las direcciones del viento que tenías un tatuaje, como si el mundo estuviera esperando que lo hicieras para seguir su curso. Recuerda que si te hubieras tatuado por una cuestión personal, el hecho lo compartirías con unas cuantas personas y de manera muy reservada. A partir de este momento hacías lo que fuera para que todo mundo notara que tenías un tatuaje: usabas ropa corta, encaminabas la plática de tal forma que todo llevara a declarar que eras una persona tatuada y demás.
El arte del tatuaje es una práctica hallada en muchas culturas esparcidas a lo largo del planeta: los vikingos eran una de las que hacían de esta práctica un ritual de protección, que que poco tenía que ver con la estética corporal. Conoce aquí sus significados en caso de que desees hacerte uno. También considera que existen tatuajes muy peligrosos que jamás debes hacerte aunque tus amigos los lleven y te veas tentado a emularlos.
