En la cuarta temporada de Stranger Things conocimos a Eddie Munson: el adolescente metalero, líder del Hellfire Club y amante de Dungeons & Dragons, que usa un chaleco de Ronnie James Dio todo el tiempo y ha pasado más años de los que debería en la preparatoria de Hawkins. Si terminaste de ver el Volumen 1 de Stranger Things 4, entonces ya sabes que Eddie es buscado por ser el principal sospechoso en la muerte de Chrissy Cunningham (aunque el verdadero culpable, como ya vimos en el primer episodio, es el viscoso Vecna).
Los padres de familia de Hawkins, que desconocen las verdaderas amenazas paranormales que azotan al pueblo, creen que Eddie es culpable. No solo porque huyó de la escena del crimen, sino porque él representa todo aquello que era temido y relacionado con el diablo en los 80. En esa época, en la vida real, organizaciones como el Parents Music Resource Center hicieron una cruzada contra el heavy metal que llegó al Congreso de Estados Unidos. Por otro lado, Dungeons & Dragons también era considerado “satánico” por la misma gente que afirmaba que los Pitufos eran diabólicos y que Hello Kitty quería decir “hola demonio”.
El personaje de Eddie Munson, interpretado por Joseph Quinn, está basado en la historia de un adolescente real que fue inculpado por un crimen que no cometió: Damien Echols. Él era parte de un club llamado “West Memphis Three”, en el oeste de Memphis, Arkansas. Junto con otros dos adolescentes, Jessie Misskelley Jr. y Jason Baldwin, fue arrestado por el asesinato de tres niños de ocho años, Stevie Branch, Michael Moore y Christopher Byers, en 1993. El caso estuvo plagado de inconsistencias, incluido el papel que jugó el pánico satánico en la convicción de los tres jóvenes. Además de ser neurodivergente, Damien era aficionado del ocultismo: algo que jugó en su contra durante el juicio.
La serie documental ‘Paradise Lost: The Child Murders at Robin Hood Hills’ de 1996, y sus continuaciones ‘Paradise Lost 2: Revelations’ y ‘Paradise Lost 3: Purgatory’, abordan el crimen, el proceso legal y la presión que ejercieron grupos conservadores para condenar a cadena perpetua a Damien Echols y a sus amigos, a pesar de que no había evidencia concluyente de que ellos fueran los asesinos. En 2007 el caso se volvió a abrir y la tecnología forense permitió la presentación de nueva evidencia por la que fueron liberados en 2011.
Los hermanos Duffer, directores de Stranger Things, se inspiraron en su caso después de ver el documental dirigido por Joe Berlinger y Bruce Sinofsky. “La historia del Hellfire Club en Stranger Things 4 y especialmente el personaje de Eddie Munson fueron inspirados por la serie documental PARADISE LOST”, confirmó Netflix en Twitter. “Eddie está escrito vagamente como el escritor y artista Damien Echols, quien fue un miembro de los West Memphis Three”.
Damien Echols dedica ahora su vida al arte y a la espiritualidad. Colaboró con Pearl Jam en la canción “Army Reserve” de su disco homónimo de 2006. También trabajó con Michale Graves, el exvocalista de Misfits, en el disco ‘Illusions’ de 2007. Una de sus más recientes apariciones fue en ‘The Midnight Gospel’, en la que prestó su voz a Darryl el pez en 2020.