Cual David Beckham, Martha Debayle olvidó el glamour de Polanco y junto a su esposo visitó el tianguis de La Lagunilla ubicado en una zona popular de la Ciudad de México cerca del ‘barrio bravo’ de Tepito, en el cual se pueden encontrar desde antigüedades hasta ropa, comida y las famosas licuachelas.
En TikTok, la usuaria @albiluvallejo publicó un video en el que se ve a Debayle en la Lagu tomándose fotos con una seguidora que la reconoció entre tanta gente. Lo que llamó la atención no solo fue que la locutora y empresaria accedió amablemente a compartir con sus fans, sino también que no dudó en comer unas ricas quesadillas en uno de los puestos del famoso mercado.
‘Y que me topo a la inalcanzable Martha Debayle’, escribió la usuaria.
El épico suceso se dio semanas después de la que Debayle se convirtiera en tendencia en redes sociales por un video viral en el que aseguró que las latas de refresco se ven horribles y, por lo tanto, cuando tiene visitas les pone fundas para cubrirlas.
En el clip, se puede escuchar la canción ‘Gatita’ de Bellakath y una chica que pregunta: ‘¿Es la de las latitas?’.
Como era de esperarse, los comentarios no se hicieron esperar y algunos internautas aseguraron que Martha Debayle estaba dándose un ‘baño de pueblo’. Por otro lado, hay quienes tomaron su visita con humor y mencionaron que fue a comprar calcetines baratos para sus latas.
¿Por qué los lugares de ‘barrio’ como la Lagu se están volviendo caros?
La presencia de la empresaria, quien se caracteriza por llevar una vida de mucho lujo, hizo reflexionar acerca de que cada vez este tipo de lugares son más populares y está bien, sin embargo, por eso han subido los precios de artículos que antes eran más baratos.
En el caso del tianguis de La Lagunilla de los domingos, antes de convertirse en el lugar de encuentro favorito de hipsters y whitexicans, era un mercado cualquiera en el que se encontraba ropa, tenis, lentes y muebles a precios bastante accesibles pese a que ya lo visitaban famosos como Rubén Albarrán de Café Tacvba o hasta la mismísima Tigresa.
Y pese a que ya vendían cervezas y algo de comida, no existían tantos puestos como ahora ni tampoco miches en todas sus formas como las famosas licuachelas, rotochelas, Kittychelas, etc.
Por eso, y que ahora el tema de gentrificación bautizó a Tepito como ‘Reforma Norte’, cada vez más lugares de ‘barrio’ como estos están aumentando sus costos.
No hay que negarlo, la vibra del lugar sigue siendo cool, pero, por favor que no nos quieran vender en un tianguis ropa al doble de su costo normal…