Todos hemos vivido alguna vez esa crisis que surge cuando alguien nos gusta verdaderamente; queremos explotar en confesiones hermosas acerca de lo interesante que la encontramos y lo banal que nos parece el mundo sin su existencia.
Para muchos no es difícil aceptar que los han flechado, incluso se sienten afortunados de estar en esa situación, pero hay quienes intentarán negar, a pesar de las señales más obvias, que se están enamorando.
El anonimato no conduce a nada bueno, si se actúa con sigilo y no expresamos lo que pensamos, entonces ser invisible quizá no sea una ventaja después de todo; las oportunidades en el amor son escasas y son muchos los factores óptimos que se necesitan para poder tener una buena relación: conocer a la persona en el lugar adecuado, durante la estabilidad emocional requerida, etc.
No existe un método infalible para obtener la atención de alguien, tampoco los consejos que funcionen si no estás dispuesto a mover un dedo, recuerda que la magia no atrae al amor, sin embargo, amar trae magia a nuestras vidas.
Un fracaso momentáneo no debería quitarnos las ganas de buscar eso que quizá nos haga felices para toda la vida.
Cuando nos gusta alguien es necesaria la capacidad creativa, el control de las emociones y el mejor uso de nuestro lenguaje escrito y corporal; cada persona tiene su método, sus gustos y formas de enamorarse, pero tomando en cuenta algunas características que compartimos los seres humanos, enlistamos estas recomendaciones que hay que considerar si quieres cruzar la línea del miedo para declararle tu cariño, admiración y gusto a esa persona que viene a tu mente cada vez que alguien menciona la palabra “amor”.
Usa una canción
Nada puede demostrar más emotividad e ilustrar a la perfección un sentimiento que la música, un buen incentivo sin duda es la melodía. Busca un soundtrack para tu situación, un verso que describa la atracción que te hace sentir, un track que englobe lo que quieres de ambos o una serie de canciones que expliquen todas las facetas con respecto a tu enamoramiento.
Escribe algo
La sinceridad expresada en letras ha sido un recurso desde tiempos inmemorables, el sentimiento nació con las palabras, pues en ella vertimos una serie de sensaciones que asociamos con la atracción a otro ser, incluso amor es una palabra con la que ilustramos la atracción física-espiritual hacia alguien; la escritura es precisa porque enfatiza los detalles que le dan gracia a una persona. Escríbele algún verso, una carta o un pensamiento corto que te haya inspirado a media tarde.
Explota tus habilidades para demostrar tus emociones
Sin duda, entregar parte de ti para decirle a alguien especial todo lo que te gusta de su ser, requiere de sinceridad. Concentra tus talentos en mostrar por diferentes medios todo lo que te inspira: si han de ser trazos con carboncillo que sean los más finos, si son letras que sean verdaderas y profundas, al hablar de notas procura encontrar la emotividad ilustrando los sentimientos con melodías y si todo se reduce a una inocente confesión, procuremos que sea concreta y real.
Busca el lugar adecuado
Todos los momentos que pasamos con la persona que nos ha traído sonrisas diarias al rostro es especial, lo sabemos, pero podemos convertir uno de ellos en el preciso. Nada ayuda más en esas ocasiones que la planeación de una velada memorable: puede ser una visita al lugar que más les gusta o trabajar en un escenario que haga sentir a esa persona la seguridad de que bajo el manto de tus emociones, pocas cosas podrían ir mal .
Hazlo sin temor
La mejor manera de expresar una emoción es hacerlo con certeza y sin temor, independientemente del lugar, las herramientas o los métodos, la actitud ante la vida influye siempre en la impresión que causamos en las personas; denotar ante los demás que estamos totalmente convencidos de que nos hemos enamorado de esa persona, es quizás el mejor argumento y carta ganadora.
Sabemos que no es sencillo, queda en incógnita si aquella persona siente y quiere lo mismo que nosotros, pero recordemos que si nos arriesgamos tenemos más posibilidades de ganar que si nos quedamos en supuestos. Seamos valientes y pensemos “Tendría que decirle que me gusta”
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