Se conocieron, hubo chispa, química y todo funcionó perfecto para convencerlos de trascender a algo más. Al parecer esta nueva persona y tú han coincidido en el tiempo perfecto y prometen tener las mismas ganas de entrar a un compromiso. Sin embargo, una relación es un trabajo constante, se trata de dos seres totalmente diferentes e imperfectos queriendo compartir un sólo espacio y propósito a pesar de las diferencias entre sus personalidades.
Si bien es cierto que no todos los noviazgos tienen los mismos patrones y acuerdos, creemos que estos consejos te dirán cómo tener una buena relación con tu pareja y lograr un equilibrio que les beneficie.
1. Permítete ser la versión más real de ti mismo
Cuando estamos conociendo a alguien y nos gusta mucho, tenemos todas las expectativas e ilusiones puestas en que esa persona será la adecuada, pues de alguna manera es romántico pensar que cada individuo con quien nos involucramos en una relación podría resultar ser el definitivo. No obstante, algunas veces podemos llegar a privarnos de ser nosotros mismos por temor a que nuestro interés amoroso se asuste o juzgue lo que somos realmente, pero la verdad es que no hay nada más agradable que conocer a alguien y saber que podemos ser como somos sin cambiar nada para quedar bien.
2. Cede y plantea acuerdos
Estamos acostumbrados a vivir nuestra vida de una manera demasiado personal y hasta solitaria, aunque vivamos con familia, roomies y amigos, es una realidad que cuando una persona interfiere en nuestro espacio nos puede resultar complicado dejar de tener cierta autoridad en nuestro día a día. Por eso, es importante recordar que una relación es una negociación y un trabajo constante; ceder a los patrones de tu pareja que no compartes pero que tampoco traicionan tu felicidad e integridad es respetar, y esto es necesario para funcionar bien en conjunto.
Plantear acuerdos y tener una comunicación clara puede ser favorecedor para una buena convivencia, desde sacrificarte a comer algo que no te gusta, pasar fechas importantes con su familia o algo más complejo, así como aceptar tener una relación más relajada, puede ser una de las claves para que todo funcione.
3. Aprende a soltar
Todos alguna vez en nuestra vida nos hemos visto sumergidos en una relación que nos provoca celos, deseo de poseer, de saber dónde está o qué hace, con quién, entre otras cosas. Llegar al punto de no pensar en todo lo anterior y estar tranquilos es una lección de vida que tal vez nos tome muchísimo tiempo poner en práctica, sin embargo, amar sin poseer tiene que ser nuestra forma de vivir una relación.
No podemos obligar a nuestra pareja a que su tiempo sea exclusivamente para nosotros, todos los días, a la hora que queramos y que nos dé explicaciones de todo. Es sano tener vidas separadas, individualidad y privacidad, tener amigos, salir con ellos y después de todo, respetar y elegir una y otra vez a quien tenemos al lado. Aprender a soltar significa no enajenarnos en el rencor y la angustia, amar solamente por el hecho de sentirlo y no esperar exactamente lo mismo, se trata de soltar los sentimientos que no podemos controlar si estos nos están haciendo daño.
4. Ama profundamente
Una vez que ya te encuentras en un estado de tranquilidad con esa persona, que ya conocen todo el uno del otro y aun así deciden quedarse, cuando saben que funcionan al ritmo que propusieron y los acuerdos son claros y permitidos por los dos, no queda más que lanzarse en caída libre y vivir la relación con intensidad.
Amar sin medida hará que coseches amor sin condiciones y naturalmente; si las situaciones no se dan como esperabas, estará fuera de tu alcance pues siempre diste tu máximo y es algo que debes recordar. Si te gustó este artículo sobre cómo tener una buena relación con tu pareja, además te gusta escribir de belleza, cuidado de la piel, comida o viajes, comparte con nuestros lectores tus mejores textos. Envía una prueba de 400 palabras a colaboradores@culturacolectiva.com y conviértete en colaborador de nuestra sección de Estilo de vida.
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