A veces es necesario darse un respiro, incluso de las cosas o personas que nos hacen sentir bien, ese es uno de los principios por los que en la cultura hindú se despojan de sus pertenencias para convertirse en hombres santos, monjes, sadhus o cualquier otro nombre que se le quiera otorgar a estos caminantes que entregan sus vidas a la reflexión a través de la cual pueden llegar a un punto de perfección emocional que los conduzca a una armonía consigo mismos y con su entorno. Por más extraño que pueda parecer, esa no es una conducta propia de un grupo religioso en especifico, deriva más bien de la necesidad casi biológica del hombre como un ser social.
El hecho de que entre sus reflexiones estas personas se tomen un momento para pensar en el bienestar de los otros debería decirnos algo sobre la constante preocupación que poseemos por mantenerlo todo y a todos en perfecta armonía. Traspasándolo a un terreno más cotidiano, podemos retomar ese tiempo que algunas parejas se toman para mejorar su relación como una especie de vigilia en pro del bienestar colectivo —en este caso el de dos personas dispuestas a todo para permanecer juntas—, mismo que como recompensa se presentará ante nosotros como la clave de la felicidad.
Citar prácticas religiosas tan antiguas —sobre todo para tratar temas tan delicados como éste— puede parecer ridículo para algunas personas; sin embargo, terapeutas como la psicóloga de familia María Elena López o la terapeuta de parejas, Ana Tulia Montañés, ven en el hecho de tomarse un tiempo la respuesta precisa a muchos de los males que aquejan una relación cuando ésta comienza a tornarse difícil. Aunque saben que existe un gran factor de riesgo al tomar esta decisión, también están conscientes de que es algo que no debe tomarse a la ligera, siempre hay algunas reglas que deben seguirse para que este proceso sea justo la clave para alcanzar la prosperidad.
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Antes de tomar una decisión tan importante deben hablar tranquilos y analizar la situación. ¿De verdad ambos necesitan un tiempo o sólo uno de los dos quiere estar lejos del otro? Una vez que estén de acuerdo en que lo más sano para su relación es un stand by, entonces háganlo a través de estos pasos.
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Todo el mundo necesita del apoyo de su familia y amigos, sin embargo, cuando se trata de un tema tan delicado lo mejor es mantener a estas personas un tanto al margen de la situación. En más de una ocasión las parejas que se toman un tiempo terminan por destruir lo poco que quedaba de su relación al dejarse llevar por la opinión de terceros. No importa cuántas personas hayan fallado después del reposo, su caso es único y deben asumirlo como tal.
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Experimenten cómo es estar sin el otro por unos días y pregúntense si eso es lo que quieren en realidad. Las situaciones negativas tienden a hacer más graves algunos aspectos que en realidad no tienen mayor importancia, es por ello que deben vivenciar esta parte de la soledad para estar seguros de que ese pequeño respiro es en realidad lo que hace falta para que todo vuelva a la normalidad.
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Reflexionen acerca de lo que los ha llevado a considerar un tiempo separados, ese ejercicio de introspección les dará un panorama acerca de lo que deben cambiar para por fin alcanzar ese punto de estabilidad emocional al que pretenden llegar después de que termine su pequeño respiro.
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Una vez que hayan decidido que tomarse un tiempo es la mejor opción para su relación, determinen cuánto va a durar ese alejamiento. En ningún caso es conveniente dejarlo como un lapso indefinido, pues eso puede dar pie a un desgaste mayor del noviazgo, tarde o temprano la soledad se va a convertir en una zona de confort que ninguno va a querer abandonar por nada del mundo.
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Tengan siempre presente que este tiempo no es para salir o sostener relaciones con otras personas. Aunque a veces suene tentador, lo cierto es que sólo dará pie a que su panorama se vea nublado y no puedan pensar con claridad acerca de la relación que están intentando salvar, empeñarse en hacer feliz a otra persona impide que alguien se dé cuenta de lo que no ha podido arreglar con respecto a su pareja inicial.
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Si decidieron que después del stand by aún quieren estar juntos, lo mejor es que vuelvan a replantear los puntos más importantes de su relación. Ya sean horarios, actitudes o hábitos, todo cambio que quieran realizar debe basarse en lo que aprendieron estando separados y aplicarlo con la mayor madurez posible, sólo así su relación no volverá a caer en un problema que, ahora sí, termine por separarlos para siempre.
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Pocos son los problemas que no puedan solucionarse en pareja, aun cuando todo apunte a un final inminente, siempre existe una solución para que, sin forzar la situación, ambas partes se sientan conformes viviendo el uno al lado del otro. En caso de que el rompimiento sea necesario, esa misma comunicación los llevará a decidir los términos en que darán fin a su historia para que ésta no resulte una experiencia dolorosa.