El blanqueamiento de tus dientes no es signo de que se encuentren saludables, de hecho, el color de estos es una de las características que cambia de acuerdo con la persona. Hay algunas que tienen un tono más amarillento y otras que lo tienen más cercano al anhelado blanco.
Por ello, que tus dientes sean muy blancos no significa que tengas buena salud bucal; el componente encargado de darle la tonalidad es la dentina, un esmalte natural que es parte de tu cuerpo, de hecho, es la parte más fuerte incluso más que los huesos. Se trata de un tejido compuesto por minerales y tiene una medida de dos milímetros de espesor. Tiene como función principal recubrir tus dientes para protegerlos de las sustancias ácidas que ingieres en los alimentos.
Sí, el esmalte es muy poderoso, sin embargo, no se regenera con el tiempo; lo vas pediendo y tus dientes quedan cada vez más expuestos.
Es verdad que ya no puedes cambiar el esmalte de tus dientes, sin embargo, el consumo de algunos alimentos y bebidas puede aumentar las posibilidades de que padezcas alguna infección, las más comunes son las caries. Éstas surgen a partir del contacto entre las bacterias que las producen y los azúcares o almidones de las bebidas y alimentos que se consumen. Cuando se unen, se crea una especie de ácido corrosivo para los minerales que conforman tu esmalte dental; las caries van surgiendo a medida que el ácido ataca.
¿Cómo puedes cuidar tus dientes?
– Evita el alcohol
– Evita el cigarro
– Usa hilo dental
– Evita que se forme sarro
– Adopta una buena técnica de cepillado
– Acude cada seis meses a una revisión dental
Tu salud bucal es más importante de lo que crees, además de darte una sonrisa resplandeciente, te ayuda a evitar padecimientos que pueden ser brutales para tu organismo completo. Si notas algún cambio en tu dentadura, lo mejor es que acudas con un especialista.
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