Tener una buena postura, además de que te ayuda a lucir bien, es una forma en la que distribuyes el peso de tu cuerpo en tus tejidos para que puedan responder hacia tu masa corporal de forma fácil y eficiente. Si tienes una postura correcta, significa que cada una de las partes de tu cuerpo están en el lugar indicado.
Cuando te mantienes en una sola posición, tu cuerpo se acostumbra a ésta y quedas atrapado en la misma, o al menos se convierte en tu eterna posición. Así que si ya te alarmaste y quieres hacer algo al respecto, acá te dejamos consejos que puedes poner en práctica para deshacerte de tu joroba.
1. Estira y afloja tus músculos
Los músculos del pecho pueden prevenir que te sientes frente a tu computadora con la espalda encorvada, por ello, si tus músculos se encuentran apretados tienes que hacer entrenamientos que te ayuden a aflojarlos y después te ayuden a estirarlos.
Algunos estiramientos que puedes hacer son:
Tramo pectoral
Bola de estabilidad de estiramiento
Estiramiento de codo
Estiramiento del pecho con las manos detrás de la espalda
Otra forma con la que puedes aflojar los músculos de tu pecho es si utilizas herramientas de masaje con bolas o rodillos de espuma.
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2. Fortalece tus músculos
Uno de los ejercicios más efectivos y populares para que fortalezcas los músculos, es usar una banda de resistencia elástica para que trabajes tus hombros y tu espalda en diferentes direcciones. Otra forma es que hagas ejercicios más grandes y con múltiples articulaciones que tengan la función de aumentar tu ritmo cardíaco y trabajar al mismo tiempo otros músculos incidentales.
Concéntrate en apretar tus omóplatos hacia atrás al mismo tiempo en el que mantienes tu espalda bien estirada y larga durante el ejercicio.
Algunos ejercicios que puedes hacer son:
Pull-ups regulares o asistidos
Pull-down lats
Flyes inversos
Filas sentadas
Filas de cables
Filas de mancuernas de un sólo brazo
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3. Trabaja con el núcleo
El núcleo hace referencia a la parte de tu espalda que se encorva; cuando te sientas o cuando vas en bicicleta, te das cuenta de que la parte de en medio de tu espalda se sale, como si fuera un movimiento natural. Justo es ese lugar que tienes que trabajar.
El planking es un gran ejercicio para que trabajes con el núcleo, ya que es excelente para que fortalezcas tu espalda y tus hombros al mismo tiempo, además de que elimina los dolores y te ayuda a trabajar el abdomen.
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4. Suéltate sin colgar la espalda
Recuerda que tu espina dorsal va desde tu cráneo hasta tu coxis, por lo que tu posición dirá mucho sobre ti y sobre todo tu cuerpo. Debes sentirte relajado, tampoco se trata de que parezcas un soldado, suelta tu espalda naturalmente sin encorvarte. Realiza este ejercicio todo el tiempo mientras estás sentado o cuando vayas caminando. No importa que el avance sea pequeño, el punto es que te acostumbres poco a poco hasta que lo adoptes.
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