Hasta parece una ironía que el hecho de compartir contenido de más sobre tu relación o sobre lo bien que están juntos, demuestre cuán inseguros están sobre su relación de pareja, en lugar de su felicidad. No es que digamos que por compartir diariamente una foto tuya con tu pareja sea señal de que no están enamorados o que no son felices; probablemente sí lo son, sin embargo, ese afán que sienten de compartirlo todo puede tener de trasfondo un problema del que no estén del todo conscientes.
Las redes sociales han llegado a nuestras vidas para conectarnos —por más cliché que te pueda sonar— y todas éstas han aprovechado que somos seres sumamente sociales para encontrar el éxito… y también para que pases horas y horas, sin notarlo, sumido en Facebook, Twitter, Instagram, llámese como se llame tu red favorita. Tal es nuestro gusto por compartir nuestra vida que cada vez es más popular el contenido efímero —piénsalo, cuántas aplicaciones en tu celular tienen “historias” que desaparecen a las 24 hrs… prácticamente todas— simplemente porque sentimos tantita emoción cuando alguien nos da un like o el número de vistas asciende a los dobles dígitos.
De hecho, este gusto por la interacción con nuestros amigos ha escalado a tal grado que ahora ya hay centros de rehabilitación para aquellos que desarrollan una adicción al Internet y las redes sociales… y es que es muy difícil renegar de la ciencia. Múltiples estudios se han ocupado en estudiar cómo afectan las redes en nuestro estilo de vida; asimismo, hay una gran cantidad de estudios que se han enfocado en analizar el comportamiento en pareja cuando se trata de la cantidad de contenido que publicas en el Facebook de tu pareja o el tuyo.
«Muros vemos, inbox no sabemos».
Seguro alguna vez escuchaste esa frase, que no es más que nuestra versión de lo que antes escuchábamos sobre las vidas de las celebridades que compartían en programas televisivos o revistas de la farándula… y pasa que no todo lo que vemos en nuestras pantallas es una versión fiel de la realidad; es, precisamente, tan sólo una versión. Aquella que quieres que tus amigos y conocidos crean de ti… lo cual nos lleva al siguiente punto:
Mientras más publicas sobre tu pareja, más inseguridad hay en su relación.
Así de sencillo, estudios de la Universidad de Missouri, la Universidad de Northwestern y la Universidad de Brunel —y esto es sólo por mencionar algunas— llegan a conclusiones similares, en ese mismo orden:
+ A mayor uso de la red social, la relación se deteriora y tiene un final más negativo que de compartir menos. Aunque es necesario remarcar que esto es cierto para relaciones de 3 años o menos aproximadamente.
+ Aquellos que publican constantemente sobre su relación, lo hacen buscando la validación que las redes otorgan. En ese sentido, cuando sentían que algo fallaba o que no se sentían del todo bien en su relación, entonces publicaban contenido para reforzar su seguridad en su pareja.
+ Mientras que el tercer estudio demuestra que aquellos con menor autoestima publican más sobre su relación; asimismo demostraron que hay una correlación entre la cantidad de contenido publicado y su felicidad, por lo que aquellos que publicaban menos se sentían más felices.
Y es que hasta parece tan obvio que es ridículo no haberlo pensado antes. Así como sucede en la individualidad, esa emoción que sientes en tus propias fotos, también lo sientes cuando se trata de algo de tu pareja. Publicar y obtener respuesta de tus conocidos hace que inconscientemente bases la valía de tu relación en otros, puesto que nos gusta la aprobación social. Nos hace sentir bien y por lo tanto nos hace creer que nuestra relación no está tan mal como normalmente pensaríamos.
Sin embargo, lo único que hace es encubrir nuestras inseguridades; que en lugar de resolver nuestros conflictos o diferencias con el otro —no importa que sea una pelea o porque no se entienden al tener ideologías distintas, por ejemplo—, suplamos esa incomodidad con una foto “feliz” en nuestro muro.