Cuando terminas una relación, quedas deshecho como si una parte de tu cuerpo hubiera sido desprendida, como si te hubieran arrancado un pedazo de tu corazón, como si el amor ya no tuviera sentido nunca más. No dejas de pensar ni un segundo en tu ex, en lo que vivieron y en lo que se prometieron; no te concentras en tus actividades y no paras de revisar sus perfiles de redes sociales todo el tiempo. Aún escuchas su voz por las noches y lloras al recordar su risa, hablas de él todo el tiempo e imaginas que, quizá, en algún momento pueden volver.
Llega un momento en el que crees que te estás obsesionando; que te estás aferrando y que esto puede ser muy grave porque lo único que tienes en la cabeza, es a él, a tu ex, incluso has pensado seriamente en pedir ayuda, ir a terapia quizá. Bueno, mantén la calma. Obsesionarte con tu ex es mucho más normal de lo que crees (esto no quiere decir que sea sano o que esté bien), pues es un proceso natural del duelo, en este caso, de tu ruptura. Acá te explicamos la razón.
Diversos estudios han demostrado que el amor es como una adicción a las drogas, sobre todo a la cocaína. Cuando rompes con alguien, es como si estuvieras terminando con la sustancia y atraviesas por los mismo síntomas de abstinencia que alguien en rehabilitación. Sí, así de intenso es enamorarse, pero también es hermoso, ¿cierto?
Durante el enamoramiento no todo es bueno y tampoco es bonito, también tiene sus lados de dolor y de angustia y todo eso es completamente normal. Así como vas a ser feliz, amar y ser amado, también llorarás y te dolerá el pecho hasta sentir que no puedes más. Y está bien. De acuerdo con un estudio publicado en el Journal of Neurophysiology, la encargada del mismo, la antropóloga Helen E. Fisher, de la Universidad de Rutgers, la adicción a las drogas es muy parecida a los comportamientos obsesivos que tienes cuando estás enamorado.
Asimismo, la experta descubrió que la sensación de desapego a una persona ilumina la misma área en el cerebro que las personas cuando tienen necesidad de drogarse; un proceso natural para la desintoxicación del adicto. Por otro lado, un estudio publicado en The Journal of Positive Psychology, descubrió que para que puedas sentirte mejor después de una ruptura, tienen que pasar once semanas, es decir, tres meses aproximadamente.
Así como dejar las drogas, superar un amor no es fácil, es cierto, pero tampoco es imposible. Lo mejor es que rompas todo lazo que pueda unirte a esa persona; borrarlo de redes sociales, soltar todo lo que te recuerde a él, así te irás desprendiendo de lo que pueda hacerte volver; así como un drogadicto debe dejar de tener contacto con la droga.
VER MÁS:
¡Ahora puedes convertirte en socio de Cultura Colectiva!
Cómo asegurar tu futuro con menos de 10 mil pesos.