Es normal que las parejas tengan buenos y malos momentos, pero tú sientes cuando lo de ustedes ya son más malos que gratificantes. Ya no tienen la habilidad y menos el amor para solucionar los problemas y arreglar las discusiones con unos cuantos besos. Las visitas entres ustedes se vuelven mortales y ya no se sienten cómodos estando juntos, la indiferencia crece a cada hora y los desplantes es su principal escudo para demostrar que su relación ha terminado.
Es doloroso aceptarlo, pero la realidad es que es mucho más sano antes de que se convierta en una relación tóxica que no les dejará nada bueno. Lo mejor es que hablen antes de que los problemas crezcan y puedan terminar en buenas condiciones; sin rencores, ni enojos y sobretodo sin odiarse después de todo el amor que se tuvieron.
1. Hay más ausencia que presencia
Ya no se ven como antes, no hay interés para que pasen noches juntos y tampoco está cuando quieres hablar con él. Ya no se extrañan como antes, te das cuenta de que ya no piensas en él cada vez que están separados. Su ausencia cada vez es más notoria y ambos se han vuelto más fríos; cuando logran dedicarse tiempo está lleno de silencios y miradas incómodas, que aunque estén presentes físicamente, su mente ya está en otro lado.
2. Notas que hay muchos cambios en él
Les encantaba disfrutar de los días juntos como si ya no existiera un mañana, pero ahora su relación ha tomado otro curso. Él ya no es tan cariñoso como antes, faltan los mensajes de buenos días y los detalles de sorpresa. Te das cuenta de que todo le fastidia y ya no está de acuerdo contigo en muchas cosas, lo que los conduce a discusiones constantes y peleas bastante amargas sin solución.
3. Quieres extrañarlo
Aunque las ganas de verlo han disminuido, siempre está presente en tu mente y extrañarlo resulta más reconfortante que verlo, porque ya no sienten nada cuando están juntos.
4. No tienen tiempo
Ya no hay tiempo para escribirse mensajes y poco menos para verse. La excusas están a la hora del día y cualquier pretexto es bueno para posponer su cita y ninguno de los dos se incluyen en los planes del otro. Le dan más importancia a otras actividades y a otras personas antes que a su relación, haciendo de ésta una alerta para saber que lo de ustedes ya no funciona más.
5. Ya no demuestran afecto
Ya no te abraza como antes y ni tú a él, los besos dejan de ser cálidos y el sexo ha desaparecido poco a poco. El amor se empieza a desvanecer y se nota en todo su cuerpo y en sus palabras. Ya no se dicen te amo antes de dormir y mucho menos cuando despiertan.
6. Ya no sueñan con dormir juntos porque se ha vuelto una pesadilla
Dormir juntos antes era un sueño para ustedes y ahora se ha convertido en un castigo. Se iban a la cama con un jugueteo de besos y caricias con el que terminaban haciendo el amor; ahora cada uno está en su lado de la cama y hasta la respiración y las mañas del otro a la hora de dormir les parecen molestas.
7. No le importa si estás a lado suyo
Si están en una fiesta con sus amigos o en alguna reunión familiar, ya no eres su centro de atención, no te busca la mirada y tampoco le interesa si te levantas y vas hacia otro lado. Deja de ser amable y atento, más que una pareja, ahora parecen un par de desconocidos o simples conocidos.
8. Ya no hay comunicación
Ya no se cuentan todo como antes, ya no tienen tema de conversación y los remplazan por discusiones y gritos constantes. Se sienten incómodos en persona y los mensajes tardan horas en responderse.
9. No se prestan atención
Ya no es relevante lo que dice el otro, por lo que dejan de prestar atención a lo que se platican. Lo que pasó en tu trabajo ya no es de su interés y tampoco lo que pasó en el suyo es del tuyo; lo que antes le parecía maravilloso de ti, ahora es aburrido y no causa ningún efecto positivo en él. Evita platicar contigo poniendo excusas como que está cansado y no te molesta porque en realidad te pasa igual.
10. Ya no eres su primer pensamiento y él tampoco el tuyo
Cuando despertabas la primera persona que pasaba por tu mente era él y la última cuando dormías. Cuando te pasaba algo emocionante o algo triste, él era la primera persona a la que le querías contar y no dudabas en llamarlo. Ahora dudas en escribirle y prefieres guardarte lo que pasó o simplemente contárselo a alguien más.
VER MÁS:
Guía para superar a tu ex en 5 pasos.
11 cosas que aprendes cuando terminas una relación larga.