Es más que una talla: así es como el tamaño de tu pecho afecta tu rutina de ejercicio

Bubis grandes, ¿un don o una maldición? Las amas y las odias, ¿cierto? Te pruebas una blusa bonita y no te queda bien porque tu busto arruina la forma; sufres de dolores de espalda por el tamaño de tu pecho; tu chamarra favorita no cierra totalmente porque… bueno, ya lo dijimos; o simplemente no puedes hacer ejercicio con frecuencia porque suele ser exhausto, sí, por el tamaño de tu pecho. Sí, es una realidad que tus amigas delanteras causen problemas a la hora de entrenar (o de vestirte o de acostarte boca abajo) pero, bueno, ya están ahí, ¿no? Más bien ahora debes poner una solución si quieres continuar con tu rutina de ejercicio para que tus boobs no sean un impedimento para que te pongas en forma. Por ello, acá te explicamos cómo tu talla de bra afecta tu entrenamiento y qué puedes hacer para resolverlo.

De acuerdo con un estudio de la Universidad de Wollongong, Australia, la mitad de las mujeres que tienen senos grandes dijeron que el tamaño ha afectado la cantidad y nivel de actividad que realizan, situación que mujeres con senos pequeños dijeron no sufrir.

Con las declaraciones, los expertos confirmaron que sí, que es un hecho que el tamaño de las boobs suele ser una barrera para que las mujeres practiquen actividades físicas. Incluso, en las estadísticas del estudio mencionaron que las mujeres con busto grande dedicaron un 37 por ciento menos de tiempo a la semana a hacer ejercicio en comparación con las chicas de senos pequeños.

De acuerdo con la psicología, el director del Champion Bra Lab, LaJean Lawson, Ph.D., menciona que muchas mujeres con busto grande dicen que no se sienten cómodas haciendo ejercicio al aire libre porque no quieren que otras personas vean cómo sus pechos se mueven de un lado a otro. Esta situación daña severamente la mente de estas mujeres, lo que influye seriamente en su decisión de ejercitarse o mejor no hacerlo.

Dolor más frustración mental…

Además de la incomodidad que suelen sentir las mujeres con el movimiento de sus senos, también sienten dolor. Cada busto se mueve de forma diferente: movimientos circulares, de atrás hacia adelante, o de arriba a abajo. La vibración hace partícipe al tejido mamario, la razón del dolor y, por ende, la poca intensidad a la hora de ejercitarse.

La solución:

De acuerdo con el estudio, una gran opción es que utilices el sostén deportivo, éste puede reducir hasta el 74 por ciento del dolor. Busca copas separadas que no se estiren, junto con tirantes anchos y ajustables para tus hombros. Te sentirás mucho más cómoda con uno de estos y te será más fácil ejercitarte. En el asunto mental, es importante que pienses que es la naturaleza de cuerpo y que no eres a la única mujer que le ocurre; la clave es que te aceptes tal cual eres y no te invadas de complejos que sólo de privan de actividades que pueden hacerte muy bien.

¿Tu don o tu maldición? ¡Tranquila! Tus boobs son parte de la hermosura de tu cuerpo, así que, en lugar de maldecirlas, ámalas y no permitas que sean un razón para no hacer lo que te gusta o para mantenerte en forma (o ponerte el escote que tanto deseas ).

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