El hecho de que empresas como Pepsi Co. estén explotando el tema de la rutina para vendernos sus productos debería ser una señal del papel tan importante que éste terrible aburrimiento tiene sobre todas las personas. Caminar siempre por las mismas calles, comer lo mismo a diario, darle los buenos días a la misma vecina –quien sólo devolverá una cara de desconfianza y ninguna palabra–, son cosas que van hundiendo al ser humano en un agujero de profunda depresión que él mismo va cavando al no atreverse a probar cosas nuevas en su vida, o bien, ni siquiera se da un respiro para reconocer cuánto ha cambiado a lo largo de los años.
La rutina es lo peor que le puede pasara una persona, sobre todo si fue uno de esos niños que soñó con ser el individuo más interesante y aventurero del mundo. El simple hecho de imaginar su poder es algo tenebroso, imaginemos que si ésta puede acabar con la vida entera de alguien, lo que haría con una relación amorosa podría resultar desastroso para el corazón de aquellos que ni siquiera se consideran sensibles.
Cuando una relación es alcanzada por el terrible espectro de la rutina a veces es mejor darla por terminada; no obstante, hay parejas que simplemente se niegan a separarse y por ello deciden alejarse el uno de otro por algún tiempo, aunque bajo una serie de reglas o acuerdos implícitos para que esa separación momentánea no termine lastimándolos más de lo que ya estaban antes de darse un tiempo.
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Es necesario encontrar una razón justa para pedir un descanso; cuando alguien toma esta decisión es porque ya no está tan seguro de querer estar con su pareja y necesita un tiempo para saber si quiere seguir con la relación.
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Si van a tomar más de un descanso, es mejor que consideren la posibilidad de que ya no quieren verse más. Dejen de mentirse y platiquen sobre ello.
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Deben aprender a distinguir las señales de que ese descanso en realidad se convirtió en una ruptura. De esta manera evitarán momentos bochornosos o lastimarse a sí mismos pensando que en serio van a regresar.
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Nunca determinen cuánto debe durar el descanso; eso sólo fuerza más las cosas y en lugar de ser algo benéfico para su relación, sólo terminarán por empeorarlo todo. siempre es mejor que cada quien analice sus emociones el tiempo que crea necesario.
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Si pidieron un descanso es porque necesitan despejarse de todo lo que les ha ocasionado la vida en pareja; por lo tanto comenzar a llevar la misma rutina con otra persona es el peor error que pueden cometer, ¿no era mejor aceptar que querían estar con alguien más?
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Hay que comprender que un descanso no siempre se trata de la pareja en sí; a veces quien pide el descanso no se siente del todo seguro con asuntos más personales. Tanto así que no cree poder tratar a la otra persona como se merece y quiere evitar lastimarle.
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Lo más importante; si la persona que pidió el descanso ─en caso de que sólo haya sido una de las partes de la relación─ aún no se siente del todo segura para comenzar de nuevo. Lo mejor es dejar de insistir y esperar una respuesta concisa.
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No podemos dejar que la rutina se convierta en una parte esencial en nuestras vidas como para que incluso algunas empresas la utilicen como una especie de slogan. Justo en el momento en que detectemos algún problema con nuestra pareja, lo mejor es hablar y en caso de ser necesario un tiempo, tratar de entender a quien lo ha pedido; ya que todos merecemos un momento sólo para nosotros.
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Fuente
Mens XP
