Ben Hopper es un fotógrafo establecido en Londres. Su trabajo comenzó al capturar a bailarines, aristas de circo y desnudos contemporáneos. En esta ocasión, su proyecto personal: Natural Beauty, declara una protesta contra la industria de la moda; la que ha marcado las pautas de la belleza, donde los límites deben seguir un código estético en el que el vello en las axilas no es permitido.
El vello corporal se ha estigmatizado, es “absurdo” el pensamiento que crea lo contrario: que éste es estético; se considera que las mujeres que lo permiten no son conscientes de la gravedad de su aspecto, incluso, podría juzgarse como una característica de suciedad. Un tabú que se ha creado a partir de las imágenes virtuosas que promueven las marcas de moda, en las que la estética se reduce a una mujer delgada, sin vello y, en ocasiones, con exceso de cirugías plásticas. Lo “fashion” se ha olvidado de resaltar las verdaderas cualidades de la mujer, la verdadera belleza en la naturalidad, para manipular a la sociedad femenina en que la belleza y la estética tienen un límite de objetividad, dejando a lo hermoso de la subjetividad a un lado.
Slant Array, modelo.
Esta serie comenzó en 2007; el artista define su trabajo como un desafío al “lavado de cerebro” por parte de la industria de la belleza. Este año, Hopper lanzó el primer juego oficial de las fotografías de Natural Beauty para The Huffington Post, un medio digital de noticias en Estados Unidos.
El grupo de modelos que participaron en el proyecto es un conjunto poco convencional de actrices, diseñadoras y amigas del fotógrafo, quienes posan para lograr el objetivo de exaltar la belleza sobre los prejuicios del exceso de pelo en la axila, dando como resultado un mensaje a dicha industria y, sobretodo, a las mujeres alrededor del mundo.
Rakel Lindgren, actriz y modelo.
Hopper se dio cuenta que las modelos se sentían ansiosas por el vello corporal. De hecho, una de ellas dejó el proyecto cuando comenzaba a dejarse crecer el vello de la axila. Mostrando que el prejuicio y la incomodidad la vencieron. Sin embargo, el artista siguió con el trabajo, logrando las fotografías que se muestran a continuación, con las que busca sorprender y romper dicho paradigma.
¿Las mujeres deben seguir las expectativas de la sociedad o, a pesar de esto, continúan siendo bellas y atractivas?
Ruby Bird, productora.
Olivia Murphy, estudiante de moda y modelo.
Ayan Mohamed, arquitecta.
Emilia Bostdt, actriz.
(La actriz sueca lanzó su fotografía en sus redes sociales, volviéndose viral instantáneamente. )
Cassia Tsura, artista.
Alessandra Kurr, diseñadora.