Por muchos siglos nos hemos preguntado sobre la vida marina, interesados en saber qué hay al fondo de lo que la vista alcanza a ver. Hemos navegado mares, los hemos llenado de basura, de sangre y explosiones, sólo conociendo lo que se ve desde la superficie. El mar cubre un 71% de la superficie terrestre y la profundidad promedio es de 3,730 metros mientras que la profundidad mayor que se ha descubierto es de 11,033 metros (localizado en la fosa de las marinas, al norte de las Islas Filipinas), que resulta ser dos kilómetros más alto que el Monte Everest. En dicho sitio, muy pocos peces pueden habitar (los cuales son ciegos y con una densidad muy baja) puesto que la presión excesivamente alta, la temperatura muy baja y la luz sumamente escasa (el Sol deja de iluminar y brindar calor al océano a partir de los 3,000 metros de profundidad).
La curiosidad nos ha llevado a buscar la manera de descubrir el contraste de la vida marítima de la vida terrestre. Aunque no podemos captar la vida en el mar en su máxima profundidad debido a la presión tan alta y carencia de luz, sí podemos marcar un contraste fotográfico de ambos mundos en una zona de nuestro alcance, como en las costas.
Te compartimos una serie de fotografías que muestran el contraste del mundo acuático al mundo terrestre en el que vivimos. Lo desconocido vs. lo conocido.
Referencia: Viralismo