Venezuela se hunde.
La inflación en ese país ha alcanzado sus peores cifras. El Fondo Monetario Internacional (FMI) atribuyó el desplome económico del país sudamericano a la baja producción petrolera y a “grandes desequilibrios macroeconómicos”. Se habla de una cifra de inflación de un millón por ciento, la cual es simbólica pero reflejo de la crisis que cada vez se hace más intensa en el país gobernado por Nicolás Maduro cuya reelección lo mantendrá en el poder hasta 2025.
Maduro y su gabinete, por otro lado, afirman que la crisis viene del exterior: la “guerra económica” librada por Estados Unidos y por empresarios que acaparan los bienes para aumentar sus precios son el principal problema de su país. Como resultado de la devaluación de su moneda durante este fin de semana, la tasa oficial pasará de aproximadamente 285 mil por dólar a 6 millones. Como medida preventiva, los funcionarios elevaron parcialmente el salario mínimo 3 mil 500 por ciento al equivalente de 30 dólares por mes.
La devaluación del bolívar ocurre mientras el gobierno de Maduro, en un acto desesperado para cortar la hiperinflación de Venezuela, redenomina la moneda cortando cinco ceros e introduciendo nuevos billetes y un cambio de nombre: Bolívar Soberano. En estos días, muchos negocios permanecen cerrados mientras que las empresas están al tanto de lo que ocurrirá para tomar decisiones. Debido a la inflación en Venezuela, varias denominaciones de bolívares se han vuelto inservibles y sólo se usan para apuestas en las calles, como mero entretenimiento.
El respaldo de una criptomoneda
Maduro ha indicado que el Bolívar Soberano tiene el soporte del petro, una criptomoneda presentada por el gobierno en febrero con un valor de 60 dólares cada petro. Sostuvo que el petro está respaldado por las reservas petroleras, algo que suena inquietante, considerando que gran parte de la producción y ganancias del petróleo en el país se están destinando a pagar las deudas millonarias con China y Rusia.
Precios dramáticamente inalcanzables
El periódico El País ha publicado un artículo que enfatiza los precios ridículamente altos que hoy se pueden ver en Venezuela: «La lista de precios hasta hoy asusta y requiere, al que los tiene, llevar montones de billetes: un kilo de carne cuesta 9,5 millones de bolívares; un kilo de tomates 5 millones, un pollo de 2,4 kilos 14,6 millones, un kilo de zanahorias 3 millones, un kilo de harina, arroz o tallarines 2,5 millones, un kilo de queso 7,5 millones, un jabón de tocador 3,5 millones, un rollo de papel higiénico 2,6 millones y un paquete de pañales 8 millones. Si se puede dar el lujo de tomar un café en taza, debe desembolsar 2 millones».
¿Qué provocará la inflación en Venezuela?
Ahora se espera un éxodo de venezolanos a países vecinos como Colombia, Ecuador, Perú o Brasil con la finalidad de hallar un trabajo o un modo de supervivencia ante una situación que se ha convertido en desesperada. Años y años de medidas equivocadas y un pueblo con ansias de libertad y justicia están llevando a Venezuela a vivir una de las peores crisis financieras y políticas de su historia.
Detrás de la crisis política, social y financiera de Venezuela existe una cultura oculta que nos cuenta muchos secretos como lo demuestran las Fotografías de cómo es estar en un ritual de santería en Venezuela.