“Ya era el día siguiente, yo había prometido portarme lo mejor posible, seguirles la corriente, sentarme en mi sillón de tortura mientras que ellos me seguían pasando terribles escenas de ultraviolencia en la pantalla. A pesar de las nauseas y el dolor, me di cuenta de que aquella música chillona que retumbaba era el cuarto movimiento de la 9º Sinfonía de Ludwig van”, los gritos de Alex se comenzaron a escuchar a través de las bocinas mientras se observa un close up de sus ojos siendo humectados por gotas ópticas. (Fragmento de la película La naranja mecánica)
Stanley Kubrick, el director, guionista y productor estadounidense, muestra en sus obras la presencia de temas críticos sobre una sociedad fracturada, enfocando la mirada en lo que se considera “enfermo” y puede llegar a lograr presión social o personal en el espectador. Gracias a la innovación y creatividad dentro de la producción, guión y dirección de sus obras, es considerado uno de los más influyentes cineastas del siglo XX.
Kubrick nació y creció en Nueva York, desde pequeño mostró gran interés por el jazz, el ajedrez y la fotografía. Trabajó en la revista Life y a los 21 años fue considerado uno de los mejores fotógrafos de EUA. Su primer corto en 16 milímetros fue The day of the fight (1949), cabe destacar que su segunda producción cinematográfica, Flying padre fue realizada en México en 1951. Sin embago, no fue hasta Atraco perfecto (1956) que logró su primer éxito.
Kubrick es considerado uno de los cineastas más influyentes dentro del mundo del cine gracias obras como: La naranja mecánica, El resplandor, La chaqueta metálica, Espartaco,La naranja mecánica, Atraco perfecto, Sendero sin gloria, Lolita, 2001: Una odisea al espacio, entre otros títulos donde ha adaptado o escrito guiones. Además, su trabajo como fotógrafo y reportero da mucho de qué hablar, en el blog del Museo de Nueva York se puede apreciar alrededor de 7 mil 200 fotografías realizadas en la década de los cuarenta del siglo pasado que presentan a los viajeros del metro.
En 1999 murió en su mansión de Harpenden (Inglaterra) a la edad de 70 años a causa de un ataque al corazón, en esos momentos se encontraba a pocos días de finalizar el montaje definitivo de Eyes Wide Shut, el tercer filme que contó con la participación de Tom Cruise y Nicole Kidman.
Este año, a 13 años de su fallecimiento, Kubrick no sólo es recordado por sus 13 filmes y su trabajo como fotógrafo, sino como uno de los hombres que cambió la perspectiva de ver el mundo a través del cine. Hoy (26 de julio de 2012) a 84 años de su natalicio, destaca tanto por su precisión técnica como por la gran estilización de sus filmes, ese obsesivo deseo por la perfección y su peculiar forma de retratar el mundo en sus obras cinematográficas.
“Si el hombre simplemente se sentara y pensara en su fin inmediato y en su horrible insignificancia y soledad en el cosmos, seguramente se volvería loco, o sucumbiría a un entumecedor/soporífero sentido de inutilidad. Porque, podría preguntarse: ¿Por qué debería molestarme en escribir una gran sinfonía, o luchar para ganarme la vida, o incluso amar a otro, cuando no soy más que un microbio momentáneo en una mota de polvo dando vueltas por la inmensidad inimaginable del espacio?”
Kubrick: Inside a Film Artist’s Maze de Thomas Allen Nelson, p.17