El perro es uno de los animales más inteligentes del mundo: puede aprender el significado de más de 200 palabras y frases, por lo que suele ser utilizado como guía, asistente e, incluso, policía. La domesticación de los perros para estar a voluntad de las personas ha provocado que la seguridad de estos animales se vea, en situaciones específicas, disminuida. Durante la Segunda Guerra Mundial el empleo de animales “facilitaban” las tareas de los soldados contra el enemigo y en algunos casos, cuando eran usados como armas, fortalecían al batallón. Los caninos fueron los animales más populares durante la guerra, participaron realizando diferentes operaciones militares en diferentes países y en muchos casos salieron victoriosos y hasta heroicos. A continuación les presento diferentes tipos de perros guerreros:
Perros paracaidistas
Estos perros guía acompañaban a las tropas que eran lanzadas en paracaídas sobre territorios que necesitaban apoyo o que iban a ser invadidos. Principalmente eran asignados en misiones especiales en las que debían detectar los encuentros con la milicia enemiga.
Perros sanitarios
Estos animales rastreaban zonas de cien metros cuadrados en busca de heridos, siempre manteniéndose al tanto de la ubicación de su conductor. Cuando los perros sanitarios encontraban a una persona, regresaban con su guía y se sentaban a su lado, afirmando que la misión había culminado; de esta manera el guía ponía la correa al perro y éste lo dirigía a donde estaba el herido. Los animales rastreaban las zonas en un alto de guerra o durante la misma.
Perros mensajeros
El trabajo consistía en llevar mensajes de un guía que se encontraba en el puesto de mando a otro que estuviera fuera con el fin de informar la situación o de dar coordenadas de blanco y posición del enemigo; en la mayoría de casos esta tarea se realizaba durante el combate. La correspondencia era guardada y protegida en un embalaje que se encontraba adherido al collar del canino.
Perros de trineo
Estos perros fueron fundamentales en la guerra; su función fue trasladar a militares y llevar municiones a los lugares de combate. Fueron usados principalmente por los alemanes en la invasión a Noruega en 1940.
Perros detectores de minas
La búsqueda y desactivación de minas fue importante para proteger la vida de los militares, esta fue la razón por la que se usaron perros para realizar esta tarea; los perros podían olfatear minas enterradas hasta 25 centímetros de profundidad. El canino se disponía a la búsqueda de minas mientras los soldados iban detrás de él. En el momento en que el animal encontraba el explosivo se tumbaba al piso en posición de alerta, la zona era marcada inmediatamente para que un experto fuera a desactivar el detonante. Cada grupo de militares que salía al terreno de explosivos se encontraba acompañado por tres perros, pues el trabajo de olfateo se dividía en turnos de veinte minutos.
Perro antitanque
Fueron perros hambrientos entrenados para buscar comida debajo de los tanques de guerra y vehículos blindados del enemigo. Estos animales cargaban en su lomo un explosivo que se activaba por medio de una pequeña palanca de madera con el fin de destruir totalmente el vehículo oponente. Esta estrategia fue usada principalmente por las Repúblicas de la Unión Soviética.
Perros de guardia
Los perros con más carácter y disciplina se destinaban a la guardia de áreas restringidas, campo de prisioneros, unidades militares o aeropuertos con el fin de atacar intrusos y alertar sobre cualquier anomalía. Estos caninos estaban totalmente capacitados para detectar objetos o personas a 50 metros de distancia.