Cuenta la leyenda que el tlatoani Moctezuma acaeció en 1520 en plena invasión española por una pedrada en su cabeza. Según la fuente que se consulte, el autor de dicha pedrada cambia. Por ejemplo, Hernán Cortés dejó por escrito cómo los propios indígenas atacaron a Moctezuma cuando éste salió por la azotea para hablar y convencer de detener el combate; Bernal Díaz del Castillo, el gran cronista de la Conquista otorga una descripción similar.
Foto: mxcity
Por otro lado, los cronistas indígenas, que conservaron el relato probablemente de la mano con la tradición oral, declaran que en realidad Moctezuma fue asesinado por los españoles. Arqueología Mexicana cita algunos de los fragmentos como el del texto Relación del origen de los indios que habitan esta Nueva España según sus historias:
«…y yendo á buscar al gran Rey Motecuczuma dizen que le hallaron muerto á puñaladas, que le mataron los españoles á él y á los demás principales que tenían consigo la noche que se huyeron, y este fué el desastrado y afrentoso fin de aquel desdichado Rey… (Códice Ramírez, 1980, p. 91)».
Los españoles arrojan los cadáveres de Moctezuma II y de Itzcuauhtzin, señor de Tlatelolco, a las aguas del lago. Códice Florentino, lib. XII, f. 40v / Fuente: Arqueología MexicanaOtras versiones indígenas no ofrecen detalles de su muerte, o bien plantean que fue por estrangulamiento, versión que se compagina con algunas de las representaciones pictóricas en las que Moctezuma aparece asomándose por la azotea, pero con una soga al cuello.
Un español sujeta por el cuello con una cuerda a Moctezuma II. enfrente se ve a un personaje muerto y con una espada clavada en el pecho. Códice de Moctezuma / Fuente: Arqueología Mexicana.No obstante de las variantes de la muerte de Moctezuma, la versión de que éste fue apedreado se propagó de tal forma que los visitantes de otras latitudes lo aprendieron como un hecho fidedigno. Tal fue el caso de Augustin Ghiesbrecht, un médico y explorador que hacia 1838 llegó a México y residió en San Cristóbal de las Casas, Chiapas. Él habría de comprar lo que supone ser el cráneo (parcial) de Moctezuma —aunque hasta la actualidad no existe certeza alguna de cómo consiguió los restos— y terminaría donándolo al Departamento de Antropología del Museo del Hombre de París.
«Indudablemente Ghiesbrecht conocía nuestra historia antigua y por tanto la versión de que Moctezuma II falleció como consecuencia de una pedrada recibida en la frente; habiendo adquirido el cráneo de referencia, lo consideró —aparentemente— prueba decisiva para calificarlo como “cráneo del emperador Moctezuma”, atribuyéndole en consecuencia capital importancia para la antropología física mexicana…» Juan Comas.
Si Ghiesbrecht tuvo algún sustento científico o histórico para declarar aquello, éste se ha perdido y así como las versiones de la muerte de Moctezuma se propagaron, también lo hizo su atribución del cráneo de Moctezuma, el cual aún se encuentra en manos del Museo del Hombre de París.
Foto: masdemx
Se trate del cráneo real del tlatoani o no, la simple aseveración del museo parisino ha bastado para otorgar cierta credibilidad a la procedencia del fósil y por lo tanto a que también se crea que es parte de nuestro patrimonio histórico y cultural, que como otros objetos de la época prehispánica nos fueron arrebatados.
Te podría interesar:
El penacho de Moctezuma y otros tesoros mexicanos que no regresarán al país
El tesoro de Maximiliano que Austria pide a México a cambio del Penacho de Moctezuma
‘Chimalli’, el tesoro de Moctezuma que Maximiliano de Habsburgo devolvió a México