Cuando se habla de seguridad siempre hay comparaciones, si tu colonia es más peligrosa o en la mía viven los que asaltan en la de junto u otra serie de conjeturas que nunca muestran algo preciso. Lo que es verdad es que muchos habitantes de la Ciudad de México son propensos a una profunda inseguridad, viven el peligro en escenarios donde la sangre y los golpes toman protagonismo y la violencia descarriada se mide en robos y amenazas.
En la Ciudad de México existen 2 mil 250 colonias en las cuales viven alrededor de 8, 851 millones de personas, cifra que sobrepasa a urbes como Los Ángeles o Nueva York. La increíble sobrepoblación y la extensión del territorio ha propiciado también que haya menos oportunidades para ciertas zonas de la ciudad y al no atenderse, sus habitantes huyen hacia el conformismo que sólo denigra la calidad de vida de los demás: los delitos aumentan y el capitalino cada vez se siente más inseguro.
Es un problema que concierne a todos, ya que nunca falta la plegaria antes de salir de casa, la bendición de la madre y los otros cientos de santos a los que se recurre cuando ni en lugares como en el metro las personas se sienten a gusto. Todos se muestran siempre a la defensiva, continuando con su vida laboral mientras protegen o ocultan las quincenas que bien se han ganado. Así es la seguridad y en estas colonias los delitos crecen como la hierba mala que parece nunca morirá.
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Morelos
Denominada por algunos como “La Morelos”, esta zona necesita de este pequeño artículo para denotar con creces lo que significa para todos los ciudadanos de la capital mexicana. Por supuesto, podemos darnos cuenta de su peligrosidad sin la necesidad de transitar por sus calles, sino con la simple fama que lo aqueja o pasando por sus estaciones del metro, una de ellas todo un emblema: Tepito. Ese mercado o tianguis es uno de los más antiguos de esta urbe, pues su fundación data de tiempos prehispánicos; tradición que se ha visto socavada por el narcomenudeo, la distribución de sustancias ilícitas, compra-venta de piratería y otros males.
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Central de Abastos
Aquí se encuentra otro de los mercados más famosos de la Ciudad de México, cientos de personas acuden a este lugar a conseguir insumos para sus negocios o uso personal, ya que ofrece precios más atractivos que otros lugares. Está compuesto por 327 hectáreas de verduras, frutas y otros derivados de subsistencia, pero al mismo tiempo también se presume que están instaladas organizaciones dedicadas al narcotráfico; las cuales ninguna persona quisiera tener de frente.
Olivar del Conde
Las personas que viven en una colonia peligrosa presumen que nunca les sucede nada porque conocen como la palma de su mano cada una de las calles y con los moradores de ese lugar: todo en orden. Sin embargo, para los visitantes encontrarse en un lugar que desconocen resulta –quizá– la peor de las pesadillas, así lo demuestra la colonia Olivar del Conde ubicada en la delegación Álvaro Obregón, ya que sus calles tienen una gran semejanza con un laberinto, uno donde se comete delincuencia con intensidad.
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Centro Histórico
Contrario a lo que se podría pensar, la colonia Centro Histórico ocupa el cuarto lugar de las colonias más peligrosas de la ciudad y la razón es simple: extranjeros, multitudes y gran circulación de dinero dan como resultado un escenario con mucha oportunidad para el delito. Basta con rodear la zona para darse cuenta de aquello, cruzar la calle de Donceles hasta topar con República de Argentina es una aventura no apta para personas sensibles.
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Anáhuac
La Avenida Ejército Nacional pasa frente al Museo Soumaya, parte de la colonia Polanco, la cual es muy transitada; sin embargo, cuando se cruza con Avenida Río San Joaquín inicia una zona donde se originan muchos delitos en la capital mexicana. Hablamos de la colonia Anáhuac donde se realizan muchos asaltos con o sin violencia que provocan un auténtico estado de crisis.
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América
Cada que llegues a la estación del metro Observatorio acuérdate de algo simple: al salir estarás muy cerca de la colonia América. De hecho, podrías llegar caminando y no es algo muy recomendable, ya que la tasa de delitos es bastante alta y con una simple vista de sus calles, te darás cuenta de que no es un sitio donde quisieras estar.
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Revolución
Muy cerca del barrio de La Merced y del Mercado Jamaica, justo al salir de la estación Flores Magón de la Línea B del Sistema de Transporte Colectivo, se localiza la colonia Revolución. Si ya la tienes en mente o pasaste algún día por ahí debes saber que de acuerdo con la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México esta zona es otra de las que registra un alto índice de criminalidad en la capital del país.
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Tacubaya
En lo que va del año, este lugar han registrado los siguientes movimientos: 424 averiguaciones previas por delitos de alto impacto, más 3,043 de bajo impacto, además de varios establecimientos que clausuraron por guardar entre sus paredes organizaciones delictuosas. Ahí, afuera del metro Tacubaya, donde colindan las líneas rosa, naranja y café y quizá has transbordado cientos de veces.
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Constitución de la República
Parece irónico que una colonia llamada Constitución de la República aparezca en el top diez de las que menos respetan las leyes en la CDMX, pero es así. Colindando con Martin Carrera y con la Calzada San Juan de Aragón, esta colonia se caracteriza por el alto índice de robos e inseguridad que irradia en cada una de sus calles.
Barrio de Cuautepec
Otro caso irónico es precisamente el Barrio de Cuautepec que cada año registra delitos relacionados con el tráfico de drogas y secuestro cuando entre las edificaciones que alberga dicha colonia se encuentra el Reclusorio Norte. Así de simple, la zona de Cuautepec es una región de extrema peligrosidad, alejada quizá del centro de la capital, pero con una fama enorme.
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Cabe mencionar que en este conteo no alcanzaron a ingresar otras colonias como San Felipe de Jesús, Obrera, El Hoyo o incluso Roma Norte o la Narvarte; éstas registran índices similares, pero en menor medida, algo que sólo nos demuestra una cosa: en cualquier sitio puede dispararse y encenderse la violencia en cualquier momento.
La seguridad –no sólo en la CDMX– se está convirtiendo en uno de los focos de atención más urgentes de este país que tan sólo el año pasado registró 35 mil 958 homicidios dolosos y culposos. ¿Cuántos otros delitos han ocurrido?