Podías ser acusado de brujería si te sorprendían degustando un poco de chocolate.
Es bien sabido que el chocolate es una herencia orgullosamente mexicana, incluso una leyenda prehispánica dicta que fue el dios Quetzalcóatl quien entregó un par de granos de cacao a los toltecas para a través de su alimentación, asegurar la salud y sabiduría de sus pobladores, así es como se explica el origen del cacao, uno de los pilares de la gastronomía mexicana.
En la Colonia, el enfrentamiento de las culturas americanas y europeas era constante, los españoles no lograban entender la cosmogonía azteca, las tradiciones, creencias y costumbres. En algún momento lo más sencillo era acusar todo aquello que desconocían como brujería, por este motivo en un periodo muy oscuro de la historia, en la Santa Inquisición, el chocolate fue estigmatizado como un brebaje de magia negra.
Foto: National GeographicPara ejemplificar este hecho histórico se suele relatar la anécdota de Melchora de los Reyes, una joven mestiza y la relación secreta que mantenía con su amante. El amante juro que se casarían si tenían relaciones sexuales antes del matrimonio, Melchora, ingenuamente le creyó y después de desposarse su amante la abandonó en pleno embarazo, rompiendo su promesa. La mujer completamente enojada buscó la ayuda de una bruja para calmar su desdicha, la hechicera le recetó un polvo especial y le dijo que debía prepararlo con chocolate caliente para que el hombre regresara con ella. Pero su amante se percató de su plan y decidió acusarla ante la Santa Inquisición por el grave delito de brujería. Melchora, como muchas mujeres fue ejecutada en la hoguera, después de recibir humillación pública con lujo de violencia, al comprobar el consumo de chocolate caliente.
Esto se sabe gracias a Martha Few, profesora de historia y estudios de género de la Universidad de Penn State, descubrimientos que realizó al estudiar la Santa Inquisición, Few determinó que la relación entre chocolate y brujería no sólo era una creencia de los españoles conquistadores, sino otro de los medios de control y sometimiento hacia las mujeres; obligándolas a cocinar el chocolate pero prohibiéndoles su consumo, alejándose de sus raíces y tradiciones.
Los mexicas creían que el chocolate era un alimento vital, que les daba fuerza y los ayudaba a tener mayor destreza y claridad mental. Las mujeres solían tomarlo durante la menopausia y el parto para fortalecerse, el calor y los antioxidantes ayudaban mucho para esto. Los españoles no sólo prohibieron el cacao, también asociaron a otras plantas con la brujería como los hongos psicotrópicos que eran usados en ceremonias religiosas y actividades como la astronomía que se encontraba fuera de su comprensión.
En el siglo XVII, la Inquisición se especializó en culpar mujeres; esclavas, indígenas, mestizas o españolas, cualquiera que se atreviera a cuestionar las normas establecidas o realizar actos fuera de la compresión europea. Por esto las mujeres se organizaban para ser lo más discretas y compartir sus remedios caseros y conocimientos herbolarios, herencia de sus antepasados.
Conforme el tiempo fue pasando los conquistadores perdieron fuerza y este tipo de creencias fueron desmentidas para darle paso nuevamente al chocolate como un alimento saludable y común, hasta nuestros días que tiene una connotación completamente positiva y se le relaciona con los buenos detalles y cariños al paladar.
Foto: National GeographicLa Santa Inquisición fue un periodo sumamente oscuro en la historia de la humanidad, miles de mujeres fueron condenadas injustamente a ejecuciones públicas y torturas crueles como parte de la colonización que pretendía nulificar las tradiciones y prácticas espirituales ancestrales. Afortunadamente estos conocimientos no fueron exterminados y gracias a la valentía e ingenio de miles de mujeres de distintas generaciones muchos de sus remedios siguen curando a una gran parte de la población.
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En portada: Eslovenia Cone