Escribir es complicado, debes estar concentrado y motivado, ser creativo, conciso y meticuloso; todo esto mientras intentas plasmar tu idea de la mejor manera posible. Y aún después de todo eso, llegas al famoso “bloqueo de escritor” en el que la batalla con un espacio en blanco para poder continuar con tu obra es algo realmente agotador.
Escribir grandes historia no es imposible. A continuación te dejamos 10 trucos para poder avanzar con relativa facilidad.
Haz un esquema
Realiza un esquema general de cómo vas a llevar los capítulos y de qué va a tratar cada uno. Intenta no entrar demasiado en detalles, piensa en un planteamiento, un nudo y un desenlace con los que puedas trabajar más adelante.
Escribe un poco cada día
Ya sea que decidas escribir desde 300 hasta 2 mil palabras o que pongas un determinado límite de cuartillas, ponte una meta con la que te sientas cómodo y puedas hacer un seguimiento cada día.
Establece un horario
Elige un momento del día en el que puedas trabajar en tu escrito. Si vas a tomar descansos, márcalos, pero nunca abandones tu trabajo.
Elige un lugar especial
Busca un espacio diferente al que trabajas o realizas actividades de ocio (especialmente, evita tu cama). Busca un lugar en el que solamente te dediques a escribir.
Busca a alguien que te aconseje
Deja que un amigo o escritor (o varios) hagan lecturas de prueba conforme avanzas. Así evitarás cambiar ideas, podrás reforzar a tus personajes, encausar bien tu historia y, finalmente, evitarás reescribir todo el libro. (Asegúrate de que sean personas objetivas.)
Investiga bien antes de escribir
Es una de las mejores maneras para evitar perder tu ritmo de trabajo. Antes de que te sientes a escribir, asegúrate de que tienes tu investigación lista y que estás bien versado en los temas que vas a tratar.
Lleva una cuenta de palabras
Trabaja en bloques y busca que cada capítulo o sección tenga una duración similar, si bien no es la regla de muchos autores, te servirá para poder comenzar.
Revisa
Revisa todo de arriba abajo, descansa unos días y vuelve a revisar. Evita lo que no te convenció, busca mejorar y corregir errores clave antes de publicar tu texto.
Publica
Cuando termines, no solamente guardes tu trabajo, publícalo en algún blog, mándalo con varios editores o súbelo a Amazon para hacerlo llegar a la gente.
Continúa
Recuerda, esto no es fácil. Es muy probable que falles en tus primeros escritos, también debes recordar que la crítica del público es pesada, pero lo más importante y lo que siempre debes recordar es que no pasa nada. Acepta las críticas como experiencia y busca mejorar para tu siguiente proyecto.
