Víctor Valera Mora, mejor conocido como “el chino”, fue uno de los poetas venezolanos más prolíficos. Nació en 1935, y estudió sociología en la Universidad Central de Venezuela. En la década de los 60, igual que el resto del mundo, su país natal vivía una situación complicada, y los giros de trama en la vida social y política lo llevaron a adoptar un pensamiento de izquierda y posteriormente a la constitución de “La pandilla de Lautreamont”, junto a un grupo de amigos artistas del núcleo iconoclasta. Sobre esta época él afirmaría: “las contradicciones echaron las cartas sobre la mesa, y tomaste partido y te convulsionaste en la lucha de clases”.
Desde su inicio en las letras, en 1961, hasta su pronta muerte en 1984, con 49 años de edad, publicó: “Canción del soldado justo”, “Amanecí de bala”, “Con un pie en el estribo”; “70 poemas stalinistas” (con el cual se hizo acreedor al Premio de Poesía del Consejo Nacional de la Cultura en 1980), y “Del ridículo arte de componer poesía”.
Este autor no sólo fue un poeta y amante de la lírica, sino que también estuvo comprometido con la difusión y promoción del arte y la cultura.
A continuación te compartimos las mejores frases de la obras de Víctor Valera Mora para darle voz al amor a pesar de las dificultades:
“Triste cuestión. Este asunto de llevar una guitarra bajo el brazo. La libertad de morirse de hambre doblemente”.
“No tengo acceso a la alegría, no tengo derecho al más pequeño de los saludos y menos aún al amor”.
“Es cierto que estoy hecho para grandes decepciones, y cierto también, preparado para inexorables alegrías que vendrán”.
“Un día serán amables los amantes”.
“Amas incondicionalmente y eres amado con vehemencia y no tolerado más de una estación”.
“¡Un niño sin juguetes es más peligroso que un océano de furias, decidido a conquistar por asalto la más lejana estrella…!”.
“Los obreros recibiendo su salario de miseria al final de cada jornada de muerte”.
“Somos tú y yo y la poética”.
“Gano lo suficiente para no morir pero no encuentro la vida”.
“Es necesario que todos comprendan que un mar de sábanas no es un campo de batalla, que el amor no escapa a nadie”.
“Si amargo es el destino de los poetas entonces vivamos a rajatabla”.
“No insistir con el corazón de los amantes, de los amantes con las alas rotas”.
“Nada se mueve ni por debajo ni por encima de tu existencia”.
“Y abrirás tus ojos y serás enterada que nada muere para siempre mientras los amantes no cesen de existir”.
“Mi vida toda la cambiaría por la cabellera de esa mujer”.
“Cada quien escoge el barranco donde romperse el cuello”.
“No se puede ser feliz cuando se respira entre un atajo de infelices”.
“Pero sí te digo ámame o bórrame del libro de la vida”.
“Hoy no tengo ni un clavo donde amarrar un gallo y un fuego distinto a otras artes me sostiene”.
“Entiéndame, yo estoy muerto de amor por usted, y por eso vivo”.
La poesía siempre encontrará la manera de rompernos y reconstruirnos de un momento a otro, por eso te dejamos 20 poemas latinoamericanos para dedicarle al amor de tu vida.