Nervioso, neurótico, hipocondriaco, jazzista empedernido, enamoradizo, cómico voluntario e involuntario, mago frustrado, ni demócrata ni socialista sino todo lo contrario. Woody Allen es sin duda una de las figuras más representativas del cine mundial, con una amplia gama de filmes y obras de teatro en su haber, cargadas cada una de ellas de esa comicidad y atmosfera que sólo el neoyorkino más famoso del mundo les podía imprimir.
Si bien, es del conocimiento público la facultad de Allen para crear situaciones realmente inverosímiles, rebosantes de acontecimientos absurdos e hilarantes que nos hacen llegar a las carcajadas, es importante destacar su habilidad y talento como escritor. Influenciado notablemente por el existencialismo de Camus y Sartre, las tragedias griegas, la muerte, el sexo, incluso las revoluciones latinoamericanas, el autor de “Annie Hall” aborda todos estos temas con su pluma de una manera satírica y divertida, logrando textos de excelente manufactura distinguidos por su estilo inigualable.
Woody Allen con Diane Keaton en Annie Hall
La obra de Allen es cuantiosa, ya que se ha ido acumulando desde sus inicios como guionista de radio y tv, sus aportaciones para el “New Yorker”, hasta la compilación de sus guiones teatrales y cinematográficos. Te dejamos 5 buenas recomendaciones que valen la pena ser leídas de Woody Allen:
Pura anarquía: Último libro del cineasta que consta de 18 relatos cargados de humor, un regreso triunfal después de casi dos décadas sin publicar, donde podemos disfrutar entre otros temas de un singular musical efectuado en la Viena de finales de siglo, hasta las peripecias de un vendedor de salchichas y el juicio condenatorio hacia los personajes de Disney .
Cuentos sin plumas: Libro donde reúne tres de sus textos anteriores, Cómo acabar de una vez por todas con la cultura, Sin plumas y Perfiles. Es muestra clara y exponencial de la agilidad y agudeza del cineasta para desarrollar historias únicas y valiosas como “Para acabar con el ajedrez, correspondencia” y “Dios una comedia”.
Manhattan: La regla de que es mejor el libro que la película se aplica sin duda aquí. Siendo el filme toda una experiencia, el texto logra envolver con los diálogos punzantes y siempre sincronizados, la angustiosa búsqueda del amor y la atrofia de la vida contemporánea que impide lograrlo.
La bombilla que flota: Es la tercera obra de teatro de Woody Allen y la primera después de Sueños de un seductor, es una comedia agridulce que se desarrolla en una comunidad humilde de Brooklyn en los años cuarenta.
Adulterios: tres comedias en un acto: Narra tres historias sobre el amor y el desamor, el matrimonio y la infidelidad. Y, como ocurre en todas las obras de Woody Allen, las situaciones disparatadas y divertidas esconden una profunda reflexión en torno a la comedia humana.