Ayer te pinté como a medio día,
Te necesitaba como hace tiempo no lo hacía,
Y lo hice con mucho detalle.
Ayer te pinté con tus sandalias amarillas y
Con muy poco maquillaje como solías llevar la cara,
Sombra azul en los parpados y carmesí en tus labios, eso fue todo.
Ayer usé el aire como un gran lienzo,
Y se me pasaron tan rápido las horas,
Borrándote por completo y volviéndote a pintar,
No me convencías, te quería perfecta.
Ayer te pinté y te borré muchas veces,
Y ahora comprendo todo, te quería perfecta,
Pero qué insensato he sido, si tú nunca lo fuiste
Y es tan grande tu imperfección, que te hace tan perfecta para mí.