Nunca imaginé,
que en un rincón del mundo,
muy lejos de mi hogar
de mi familia,
de mis costumbres,
de mi rutina…
en una ciudad,
construida sobre tres colinas
con calles sinuosas y exquisitos dulces…
mi vida fuera a cambiar para siempre…Siena.
Creía tener todo bajo control,
mi vida estaba completa
o al menos eso creía,
mi corazón latía constante…
Era un día normal,
aún recuerdo cómo se sentía
la brisa entre mi cabello,
el sol encandilaba mis ojos verdes
mi piel brillaba más que nunca,
la primavera se metía por los poros…
tenía mi vida planificada, ¿qué podía salir mal?
mi alma estaba en calma….
Pero la vida a veces te tiene preparado otro plan…
y entonces, te vi…
y un terremoto sacudió mi corazón
no podía entender lo que me pasaba
tu mirada mis labios miraban
no podía evitar ponerme nerviosa
un amor prohibido se asomaba,
un ángel con una misión, en apenas unas horas
mi vida invadió, y de mi corazón jamás salió.
Las campanas de la Catedral anunciaban
que en pocas horas yo debía marchar
volver a casa, la cotidianeidad…
sin jamás imaginar que mi vida no volvería a ser igual.
Aún estando a miles de kilómetros,
aún sabiendo que nada ocurriría…
ese día, mi corazón marcó para siempre.
Sólo cruzamos palabras y miradas
pero fue tanta la pureza de ese mágico momento
que mi amor, creyendo saberlo todo
se entristeció profundamente
porque sabía que nunca podríamos estar juntos.
El deseo curtió mi piel, y un velo tapó mi ojos
mis noches se volvieron eternas
y se ahogaron en llanto silencioso.
Mi labios piden a gritos un beso lujurioso,
de esos que se dan cuando amas como loco.
Cada día suelo mirar el cielo
intentando encontrar una explicación
pero el amor no pide permiso
no ve caras, sólo ve corazón..
sé que tú también miras al cielo pidiendo por mí
por lo que no fue y tampoco será
Sé que al igual que yo,
sueñas a mi lado estar
pero esta historia debe terminar
Con lágrimas en los ojos,
solemos día a día continuar
yo aquí, tu allá…
como si no hubiéramos visto esa estrella fugaz.
con impotencia en el pecho,
de no poder hacer nuestros sueños realidad
con palabras en la boca, que jamás se dirán
con un nudo en la garganta
que dice Adiós a este amor furtivo
aunque nunca más pueda tu mirada olvidar.
***
Las fotografías que acompañan este poema pertenecen a la fotógrafa española, Martina Matenco, puedes conocer más sobre su trabajo en este link.
***
Todos sabemos cuando hemos encontrado al amor de nuestra vida, y si un día se va, es probable que nuestro corazón no vuelva a ser el mismo; sin embargo, siempre hay que disfrutar de los breves instantes de felicidad que la vida nos otorga por lo que estos poemas son perfectos para dedicárselos a tu pareja y demostrarle cuánto la amas.