A continuación un texto escrito por la joven autora Alejandrina Sánchez Viñas, quien expone con su particular estilo una especie de manifiesto en torno de la identidad, la felicidad y los deseos propios. Disfrútalo.
Ahora lo sabes y da igual
Y entonces sucede, te das cuenta de que has llegado a una edad en la que agradeces por quienes han permanecido y quienes se han sumado a tu vida. Y te gusta, y te alegra, y te sientes plena, porque da igual si has cumplido expectativas de quienes te criticaron, de quienes hicieron planes para ti o planes contigo, y que se han atrevido a decir que no cumpliste, como si fuéramos por la vida comprometiéndonos con todos antes que con nosotros mismos, como si la vida se redujera a una serie de compromisos, la vida es más y lo sabes, ¡ahora lo sabes!
Ahora lo sabes, y da igual, sólo tú conoces todo lo que has pasado, lo que has aguantado, cuando estabas sola, cuando te sentías sola, y llorabas, y decías no creer, cuando sólo tu reconocías que el mal humor era sólo un pretexto para que te hicieran caso, y había quienes te decían que resistieras, como si ser infeliz fuera una forma de vida.
Y ellos te hablaban de desperdiciar, esas personas que te obstaculizaban. Y entiendes, después de todo, que perder también puede ser ganar, porque si tú lo decides es crecer, es aprender y decidir por lo que no se quiere, por lo que no te suma, sino por el contrario, es aquello que resta, y resta a tu esencia.
Ahora lo sabes y da igual si te definen como exigente, como si después de lo que has pasado no lo merecieras, cada día evolucionas y te transformas, no puedes pedir lo mismo que hace algunos años, cuando te creían débil e insegura, cuando la edad era una excusa y la madurez la anteponían como razón.
Da igual si has perdido más de una batalla, te has hecho más fuerte, te has dado cuenta del amor propio, de la importancia del “creer en ti”, de la tranquilidad de cuando entrelazas tus brazos para ti misma, y te abrazas porque es seguridad con la que te abrazas, porque te quieres, porque te respetas. ¡Ahora lo sabes!
Ahora sabes que has ganado, porque has ganado experiencia y has restado, ¡las matemáticas no son tan complicados como te hicieron creer! Has restado la envidia, el rencor, los quizá mañana, y sólo sumas, sumas los buenos deseos, las buenas caras, las risas, los momentos, los recuerdos, los te quiero y los yo también.
Porque tú también te extrañabas, anda, guapa, sí que te extrañabas, esa sonrisa tuya que sólo es sincera cuando la genera un buen ser, cuando un momento te llena de gozo y explotas, explotas de felicidad, ahora lo sabes, ¡es felicidad!
Da igual si deciden bajarse del tren de tu vida, habrá otras paradas, habrá otras personas, y habrá quienes vuelvan a subir, o quienes ya no regresen, da igual, quizá estés muy lejos de ser quien te dijeron que fueras, pero cada vez más cerca de quien tú quieres ser, ¡ahora lo sabes!
*
Las imágenes que acompañan al texto pertenecen a Irene Cruz.
Puedes apreciar más de su trabajo fotográfico aquí.
***
El amor nos vuelve locos, nos llena el cuerpo de felicidad y esperanza; por eso la poesía es otra manera de demostrar lo que sentimos: “Voy a escribir en tu espalda para dejar marca”.