En el mundo existen millones de posibilidades; somos basura cósmica que por fortuna existe, eso somos. Todos causan y causamos sinsabores, momentos de felicidad, momentos de angustia, momentos de diversión y algunos momentos de profunda tristeza, una tristeza inolvidable, irrecuperable y punzantemente dolorosa.
¿Qué duele? No hay respuesta, nadie la ha hallado hasta ahora, los sentimientos son una serie de aspectos que nos hacen humanos, pero que también nos acercan al más mínimo insecto o más gigante vertebrado. El dolor se siente, es lo único que hemos podido comprobar.
¿Cómo se cura? No hay respuesta, nadie la ha hallado hasta ahora, la cura puede ser tan dolorosa como el mismo dolor que se siente. La cura es sólo algo que necesitamos, a veces la hallamos, a veces no. La cura no borra un recuerdo; la cura no borra un dolor. Sólo nos permite guardar el pasado, pero no lo elimina; es imposible. Aún no hemos hallado la manera.
¿Olvidar? No, no hay respuesta, nadie la ha hallado hasta ahora; olvidar es una palabra que creamos para creer que podemos lograrlo. Sólo se olvida lo que no se recuerda. Aún no hemos hallado la manera.
¿Amar? Amar es todo y es nada, puede ser tu felicidad completa o tu máxima fuente de sufrimiento, el amor no es obvio, no es real, no es irreal, simplemente existe y se interpreta, lo único en lo que coincidimos la mayoría de basuras cósmicas es que se da, se comparte, se entrega, se regala.
El amor nos hace humanos y a la vez animales, el dolor es fundamental para la vida, es fundamental para el amor.
A veces simplemente debemos sentir dolor para amar y darnos cuenta de lo mucho que podemos ofrecer en amor.
No sé si me convertí en una persona así por lo que me ha pasado, no sé si es temor mostrar mis sentimientos como lo hago ahora; no sé que soy, no sé realmente muchas cosas sobre mí. Sólo sé con seguridad y certeza que eres la persona con la que quiero compartir eso que soy o eso que no sé que soy. Puede ser ahora, o puede ser luego. Pero de todos los sentimientos que han pasado por algún lugar de mi alma, espíritu o corazón -o donde se encuentren-, el que más he sentido, ha sido el amor; sólo por una persona, una mujer, un sol que parece un ser humano en la tierra. El dolor que me ha sofocado siempre ha sido pisoteado por la fuerza del amor.
Pero a quien debemos amar por encima de cualquier cosa es a quien cargamos a diario en nuestro cuerpo prestado. Somos nosotros mismos.
Ámate y luego ámame, si así lo deseas.
Los hombres y mujeres se enamoran por igual, sienten explosiones y líneas de luz en su interior, Ellos no lloran por una mujer, descubre porqué.