Te compartimos un poema de Ivonne Méndez que nos dice que es mejor amar de lejos, así, para no sentir tanto y que esto no nos rompa por dentro:
Amémonos de lejos,
No nos toquemos tanto.
No vaya a ser que nos rompamos
O que nos entreguemos un tanto
en la inconsciencia que robamos.
Amémonos así…
Tú en tu mundo y yo en el mío.
Cerca de ti, jamás así.
Cerca mío, un escarnio.
Nos podríamos apestar.
Amémonos lejanos
No nos veamos tanto,
corremos el riesgo
de desgastarnos un tanto.
Y quién nos habrá de salvar.
Sigues tú ahí y yo aquí,
que falta no hace acercarnos.
Si en las apariencias
podemos amarnos.
Me has dicho, melodioso.
Atónita respondo:
¿Amémonos en esa ilusión?
Qué te hace torcer
tus alas que te adormece
en ese mundo que vives.
¿Amémonos así, fríamente?
Sin cercanía, ni latido.
¿Amémonos así?
Sin sentirnos tanto,
sin vivirnos tanto.
¿Amémonos así?
Indiferentes y ausentes.
Distantes y a destiempo.
Si eso quieres, si eso pides.
No estaremos amando,
¡estaremos matándonos!
Y para matarte así
No cuentes conmigo.
Yo aquí me retiro…
Porque amarte así,
matarte así
es sucumbir en vida.
**
Si cuando te enamoras esa persona te hace sentir universos y estrellas revolotean dentro de tu estómago, te dejamos Planetas que se juntan. Los lunares forman constelaciones, si las de tu pareja también lo hacen, debes llamarle algo así como Una galaxia personal, tal vez ellos te inspiren a escribir un nuevo poema sobre la piel.