Cuida tus palabras,
de ellas sale toda tu valía.
Hace años que dibujé el tiempo
con labios y lunares.
Y ahora esos labios y esos lunares
viajan a través de la red
para llegar hasta la tuya…
Y así nuestras bocas, labios y lunares
se enredan a veces,
o a veces, casi nunca…
Lunares en bocas,
que se desearon antes de las redes.
Bocas ya perdidas en la Luna
y que desde allí anhelan un siempre.